El pasado fin de semana, vándalos atacaron la Catedral de la Anunciación de la Iglesia Ortodoxa Rusa de la Ciudad de Buenos Aires, con grafitis e insultos al presidente de ese país, Vladimir Putin.
“Putin=Stalin” (por el ex líder soviético, Joseph Stalin) y “Genocida” se puede leer, escrito con aerosol verde, en la puerta del edificio ubicado en calle Bulnes 1743, en el barrio porteño de Palermo.
El templo es la principal iglesia de Rusia en nuestro país, que tiene una gran comunidad de habitantes de esa nacionalidad.
Frente a esto, la Embajada de la Federación de Rusia en Argentina, expresó: “El 2 de abril, vándalos atacaron el edificio de la Catedral de la Anunciación de la Iglesia Ortodoxa Rusa del Patriarcado de Moscú en el barrio de Palermo de la Ciudad de Buenos Aires, dejando en su fachada inscripciones que insultaban a Rusia y su liderazgo”.
La embajada rusa en nuestro país consideró que se trató de acciones “escandalosas” contra un sitio de valor cultural y espiritual para los creyentes, e instaron a las autoridades argentinas “a que encuentren y sancionen a los responsables”.
Por su parte, Federico Pugliese, Director General de Entidades y Cultos de la Ciudad de Buenos Aires, señaló: “Repudio profundamente este acto y reitero mi posición de que la violencia nunca es el camino hacia la paz, sino el diálogo y la solución pacífica de conflictos”.
En tanto, la Secretaria de Culto manifestó su solidaridad con la Iglesia Ortodoxa Rusa y con toda su feligresía “ante los hechos agraviantes sucedidos el pasado domingo que vulneran la convivencia pacífica y los principios de la libertad religiosa que caracteriza a nuestro país”.
ag / ds