Fallas

Juan Sánchez: “Hay sectores que tienen una regulación muy mala o están sobre regulados o sub regulados”

El economista uruguayo, analizó las fallas regulatorias estructurales en transporte, fútbol y sectores clave, y advirtió sobre los riesgos de la ausencia del Estado.

Pesos argentinos y dólares (Cedoc)

En diálogo con Canal E, el economista Juan Sánchez sostuvo que tanto el transporte como el fútbol en Uruguay siguen atrapados en esquemas de regulación “muy deficientes” que afectan la competencia y la transparencia.

Problemas de regulación y paralelismos entre Uruguay y Argentina

Sánchez inició el análisis recordando que muchos sectores uruguayos enfrentan déficits históricos de regulación: “Hay sectores que tienen una regulación muy mala, muy deficiente, o están sobre regulados o sub regulados”.

Señaló que Uruguay y Argentina comparten estructuras similares: “Somos el pueblo más parecido a ustedes de toda la región”, dijo, destacando la interdependencia social y económica entre ambos países.

El economista repasó los avances en áreas como energía, comunicaciones y agua, explicando que la transformación energética uruguaya fue posible por el fortalecimiento de unidades reguladoras: “Hubo un esfuerzo muy importante para fortalecer las unidades reguladoras, que no existían antes”.

Sin embargo, recordó que estas instituciones aún enfrentan limitaciones: “Todavía no están 100% bien regulados… pero son sectores que han avanzado mucho”.

Con respecto al sistema financiero, Sánchez señaló que Uruguay reforzó la regulación tras la crisis de 2001-2002, pero lo hizo orientado principalmente a proteger a los bancos: “Más que cuidar al usuario, lo que se hizo fue cuidar el trasero de los bancos”.

Incluso ironizó que el Banco Central funcionó como “una especie de guardería de bancos”, poniendo el foco en preservar la solvencia del sistema antes que los derechos del usuario.

Fútbol y transporte: dos sectores “críticamente mal regulados”

Al entrar en los sectores más conflictivos, Sánchez fue categórico: “Hay dos sectores muy regulados pero mal regulados: el fútbol y el transporte”.

Sobre el fútbol, cuestionó la ausencia de un regulador eficaz: “No hay un ente regulador del tema del fútbol. Está la FIFA, que en realidad no se controla ni a sí misma”.

Relató que la intervención de la FIFA en Uruguay introdujo estándares de transparencia, pero el sistema aún dista de estar saneado. Para ilustrarlo, recordó el rol dominante del histórico grupo Casal: “Teníamos un monopolio absoluto… era la prueba de que no había transparencia”.

Destacó que la apertura competitiva reciente triplicó las ofertas por derechos audiovisuales, lo que demuestra la importancia de regular.
Respecto al transporte, alertó que se trata del sector más rezagado en la transformación energética: “Todo el mundo sabe que hay que transformar a eléctrico todo el transporte”, señaló.

Pero el principal problema, dijo, es estructural: “Hay un monopolio absoluto… y no hay una unidad reguladora independiente”.
Indicó que la nueva unidad creada en el presupuesto nace debilitada porque incluye actores que son “juez y parte”, lo que compromete su capacidad de control.

Antes de cerrar, destacó un punto crucial compartido con Argentina: “El Estado siempre tiene que estar presente… cuando se pasa dos pueblos termina haciendo daño”, advirtiendo que tanto la falta como el exceso de regulación generan efectos negativos.