LA SUCESIÓN DE SCHIARETTI

Llaryora afina sintonía con el círculo rojo y Juez pide un voto de confianza

El candidato de Hacemos Unidos por Córdoba avanza en la construcción del nuevo vínculo que el “peronismo ampliado” busca tener con el empresariado, fuertemente marcada por las gestiones de Schiaretti y De la Sota. El líder del Frente Cívico pide una oportunidad y se muestra confiado en fortalecer la relación, mejorada en los últimos años. Asegura que contará “con el mejor equipo de funcionarios que se pueda armar en Córdoba”.

LLARYORA Y JUEZ. Los candidatos buscan acercarse al empresariado. La semana que pasó profundizaron su estrategia de posicionarse en ese segmento. Foto: El doce tv

La semana que pasó dejó algunas conclusiones importantes para el empresariado de Córdoba de cara a las elecciones del 25 de junio. Sucede que los dos candidatos de las fuerzas mayoritarias lanzaron propuestas concretas (muchas de ellas ligadas a la seguridad) y ambos tuvieron un mano a mano con los hombres y mujeres de negocios locales. El candidato de Juntos por el Cambio, Luis Juez, organizó una cena para recaudar fondos y Martín Llaryora se presentó en la Bolsa de Comercio de Córdoba para brindar su visión de país y contar parte de los planes que concretará si es elegido como el sucesor de Juan Schiaretti.

Justamente el nombre del gobernador, y también el de José Manuel de la Sota, son las nítidas referencias que surgen en la mente de los empresarios a la hora de pensar en lo que se viene: un gobierno que no tendrá el sello de los dos nombres fuertes del peronismo.

“Hay cautela, como es lógico por lo que va a suceder después de más de 20 años, y si bien están quienes prefieren a Llaryora y otros a Juez, no estamos ante un escenario trágico”. La frase es del dueño de una empresa mediana/grande que reconoce las diferencias entre los candidatos (un perfil de gestor más marcado en Llaryora) pero pone de relieve el “acercamiento” que logró Juez en los últimos años y particularmente desde que tomó la decisión de ser candidato a gobernador.

“Juez está haciendo un esfuerzo grande con los empresarios. Sabe que la mayoría le achaca su mala gestión en la Municipalidad, pero él hace hincapié en que se rodeará de un muy buen equipo y que no ‘romperá nada’ de lo que hizo Schiaretti”, añade.

Las referencias a Schiaretti por parte del líder del Frente Cívico seguirán siendo positivas, o en todo caso neutras. “Hay que pegarle a Martín, que intenta que lo comparemos con el gobernador y con De la Sota y está muy lejos de eso”, dicen en el entorno de Juez, aunque saben que los empresarios esperan un poco más.

Lo corrobora un asistente a la cena del lunes pasado: “Nos pidió apoyo, que confiemos en él. Una vez más. Es cierto que nos gustaría escuchar algo más profundo, pero hay que reconocerle que se mostró tal cual es: dijo que va a estar metido en lo político pero que gestionará con un muy buen equipo, el mejor que pueda tener Córdoba”.
El armado de ese equipo es una incógnita. Algunos aseguran que la presencia de potenciales ministros y funcionarios del radicalismo sube y baja de manera permanente. En ese armado de equipos, dirigentes del PRO van ganando cada vez más espacio.

¿Fuera de libreto? El martes pasado, Llaryora disertó en la Bolsa abriendo el ciclo Candidatos 2023, por donde pasarán quienes aspiran a ocupar el despacho principal del Centro Cívico. En la presentación habló de su visión de país, donde destacó que “el país castiga con retenciones cuando el mundo promociona las exportaciones. A Córdoba le corresponden US$ 3.000 millones que se nos van por las retenciones, casi el equivalente a todos los gasoductos de las provincias”.

También puso el foco en la energía: “No podemos perder esa oportunidad. La Argentina tiene litio, hay casi una Vaca Muerta del litio…”. Esa “visión de país” también dejó una fuerte definición política: “Hay que ampliar las coaliciones, hacer un Juntos por la Argentina, un esquema mayor. Córdoba está mejor y el dato mata el relato. Según el último Censo crecimos en 400.000 habitantes, por eso se estresan los servicios: en diez años crecimos (el equivalente a) casi una provincia más. Córdoba generó condiciones que la Argentina no generó”, dijo Llaryora.

A la hora de las preguntas, sin embargo, vino lo mejor. Ahí, Llaryora pareció salirse del libreto cuya estrategia incluye no subir al ring a Luis Juez. En ese sentido, consultado por la relación que mantiene con Schiaretti, y los fondos que éste destinó a la ciudad de Córdoba, le recordaron “lo traumática” que había sido la relación De la Sota-Juez.

“Traumática fue la administración, si algunos la interpretan de otra forma allá ellos”, sostuvo, despertando el aplauso de los empresarios. “La hacen fácil algunos…todavía estamos pagando los empleados (que sumó Juez). Vamos a tener 30 años para discutir eso. Yo creo que se la hacen fácil a Juez. Toda la culpa la tiene el gobernador. ¿Y los que hicimos las cosas bien, como en mi caso en San Francisco?”, precisó.  

Respecto a los 24 años que lleva el peronismo en el poder, Llaryora fue tajante: “Acá se respetó la Constitución y la gente votó. Ahora, si alguien cree que yo soy lo mismo que De la Sota… hace 24 años militaba con él, pero yo estaba en la universidad. Nos plantean los 24 años como un problema, pero parece que lo hacen con nosotros nomás, porque no veo que digan lo mismo del otro lado: ¿cuántos años lleva en el gobierno (Horacio) Rodríguez Larreta? ¿20? Pero lo traen acá y le levantan la mano y dicen que va a ser Presidente. No es un problema. Otro caso: Río Tercero, gobernada por el jefe de campaña (de Juntos por el Cambio). 24 años en el poder... ¿Es un problema? Si les preguntan van a decir lo mismo que yo: la gente los votó. Pero nos critican a nosotros”.