San Justo: ingresó a una casa para robar una bicicleta y la familia entera lo interceptó

Un delincuente intentó robar una bicicleta en la localidad de San Justo, partido de La Matanza, pero su plan se frustró cuando tres mujeres de la familia lo enfrentaron a golpes y lograron ahuyentarlo. Todo el episodio quedó registrado por una cámara de seguridad que muestra cómo las víctimas reaccionaron ante el intruso.

El hecho ocurrió en la madrugada del lunes, cerca de la 1:30 a.m., en una casa ubicada sobre la calle Perú al 2700, a pocos metros del centro de San Justo. Las víctimas relataron que escucharon ruidos extraños y salieron al pasillo para verificar qué ocurría. Allí encontraron a un joven, con una mochila en la espalda, que intentaba pasar una bicicleta por encima de la pared.

En ese momento, Martina, de 17 años, fue la primera en reaccionar. En diálogo con TN, contó: "Primero pensé que era un gato, pero cuando vi al tipo con mi bici, reaccioné. No sé, fue instinto. Lo corrí para frenarlo”.

La adolescente, que estaba estudiando, salió corriendo descalza y en ropa interior para atacar al ladrón. Mientras el delincuente intentaba escapar, ella lo golpeó con puños y patadas.

El ladrón huyó tras recibir golpes con un secador de piso

Pocos segundos después, la madre de Martina se sumó al enfrentamiento, y luego intervino el abuelo de la joven, quien tomó un secador de piso y le propinó un golpe en la espalda al delincuente.

El ladrón, al verse superado, comenzó a gritar desesperado: "¡Déjenme, ya está!". Sin embargo, la familia siguió defendiéndose hasta que el sujeto huyó saltando por los techos.

"Yo estaba con una bronca bárbara porque se quería llevar mi bici", expresó Martina, todavía indignada por lo sucedido.

Denuncia y búsqueda del ladrón

Tras el violento episodio, la familia realizó la denuncia correspondiente, pero hasta el momento la Policía no logró localizar al delincuente.

El caso es otro ejemplo de cómo la inseguridad sigue afectando a vecinos de La Matanza, donde los robos en viviendas y la violencia delictiva se han vuelto moneda corriente.