Las acciones de EE.UU. tuvieron uno de los mayores repuntes en el mercado alcista de los últimos 9 años y medio, ya que los principales índices aumentaron al menos un 4,9 por ciento. El crudo subió casi un 10 por ciento.
Todos excepto uno de los miembros del S&P 500 avanzaron, el Dow Jones Industrial Average subió más de 1.050 puntos y el Nasdaq 100 subió un 6 por ciento. Cada ganancia fue la mejor desde 2009, el año en que comenzó el mercado alcista más largo de la historia. Las acciones de los consumidores avanzaron a la par del repunte y Amazon subió un 9,5 por ciento después de reportar ventas récord de vacaciones. Cada miembro de la cohorte FAANG se recuperó al menos un 6,4 por ciento, mientras que los productores de energía aumentaron a medida que el crudo pasaba a US$46 por barril.
Donald Trump dijo un día antes que la derrota que hizo caer las acciones un 19,8 por ciento brindaba una "tremenda oportunidad de compra". Kevin Hassett garantizó que el trabajo de Jerome Powell es "100 por ciento seguro", dato que los inversionistas recibieron de buena manera. El mejor repunte del petróleo desde 2016 se sumó al aumento de las acciones.
"Fueron probablemente unas buenas vacaciones orientadas a la venta y eso posiblemente tiene mucho que ver con lo que está sucediendo hoy", dijo Kim Forrest, gerente senior de cartera en Fort Pitt Capital Group. "Que el presidente de la Fed no vaya a ser despedido tiene mucho que ver y que todos estén contentos de que Powell conserve su trabajo y que la confusión sobre el tema se haya disipado por hoy. El mercado se inclina de una u otra manera y, con frecuencia, puede hacer lo que está haciendo hoy, que es subir más alto. El lunes el mercado se inclinó hacia abajo. Es un movimiento espectacular".
Las acciones buscan dar fin a uno de los diciembres más difíciles, a medida que una serie de vientos se combinan para arrastrar el índice de referencia de EE.UU. Se evidencia que los consumidores, una parte clave de la economía estadounidense, permanecen en una posición sólida y de esta manera se calma la ansiedad generada por los temores de una desaceleración global y un recorte de personal en la administración estadounidense. El impulso final a las acciones se dio tras un informe emitido en la tarde que informaba sobre el viaje de una delegación de EE.UU. a Pekín, en dos semanas, para sostener conversaciones comerciales.
Los estadounidenses se vuelven más pesimistas sobre la economía
Hassett fue el último funcionario del gobierno que intentó calmar los mercados después del informe de Bloomberg el viernes sobre el presidente Donald Trump y su pregunta relativa al despido de Powell. Steven Mnuchin fue criticado por decir que había llamado a los jefes de los bancos para evaluar la liquidez. Ayer Trump expresó que confía en Mnuchin.
El crudo aumentó, el dólar se mostró más fuerte en comparación con sus principales pares y los bonos del Tesoro cayeron. Los intercambios en toda Europa permanecieron cerrados por las festividades.
Las acciones japonesas cerraron más alto tras una ola de compras tardías después de fluctuar a lo largo del día. Las acciones coreanas cayeron después de un día festivo, y las acciones de Shanghái cayeron por segundo día consecutivo. Los mercados de Australia y Hong Kong estuvieron cerrados.
El crudo West Texas Intermediate se recuperó para comercializarse por encima de US$44 por barril. El yuan offshore cambió poco después de que China emitió las nuevas reglas que prometen tratar a todas las empresas por igual, el último paso positivo en términos de comercio e inversión, ya que se detuvieron los aumentos arancelarios de EE.UU. y China.
"Hay mucha incertidumbre en el corto plazo y eso tiene sentido", dijo Gershon Distenfeld, codirector de renta fija de AllianceBernstein, en Bloomberg TV. "Vamos a tener mucha volatilidad. Pero es absurdo decir que ’el mundo está llegando a su fin’ de cara a los datos fundamentales que tenemos".