El gobierno logró swaps para solo el 10% de los bonos denominados en pesos por US$1.600 millones que vencen el 13 de febrero, ya que la mayoría de los inversores rechazaron reemplazos, incluidos valores de tasa flotante o notas similares a los llamados bonos duales que vencen la próxima semana.
Los analistas habían dicho que todas las opciones implicaban una pérdida para los bonistas de al menos 7%, en el caso de valores vinculados a la inflación. Después de los swaps, el gobierno aún debe resolver otros US$1.400 millones. El ministerio de Economía dijo la semana pasada que esperan organizar otra operación de deuda el 11 de febrero.
“Hubo algunas expectativas en el mercado de que el gobierno había lanzado esta oferta después de un acuerdo previo con el mayor titular”, asegura Diego Chameides, estratega de Banco Galicia. “Pero este resultado muestra que el acuerdo nunca existió y no cumplió con las expectativas”.
El gobierno de Argentina acaba de iniciar las conversaciones con los tenedores de bonos bajo derecho extranjero y el Fondo Monetario Internacional para reestructurar su enorme carga de deuda. Desde que el presidente Alberto Fernández asumió el control el 10 de diciembre, el gobierno ha recurrido a las ventas locales para renovar los vencimientos bajo ley local en pesos.
El mayor titular de los bonos duales es Franklin Templeton, que posee el 24%, según datos de Bloomberg al 31 de diciembre.
En el swap, Argentina vendió US$127 millones en bonos vinculados a la inflación, US$24 millones en bonos vinculados a la tasa Badlar, US$12 millones en bonos duales y US$2 millones en bonos vinculados al dólar, todos con vencimiento en agosto de 2021, según el comunicado. Para atraer a más inversores, el gobierno había relajado anteriormente las normas para las compañías de seguros locales.
El bono dual se paga en pesos al valor nominal más alto en moneda local más un interés en pesos, o el valor nominal convertido al tipo de cambio oficial con un interés en dólares. Alrededor de 80% de los bonos duales están en manos de inversionistas extranjeros, dijo el 31 de enero el secretario de Finanzas, Diego Bastourre.