El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, defendió este lunes su decisión de retirar a las tropas estadounidenses de Afganistán, enfrentando las críticas de que la medida sumió al país en el caos cuando los talibanes reafirmaron el control.
“Estoy totalmente de acuerdo con mi decisión”, dijo Biden el lunes mientras se dirigía a la nación desde el Salón Este de la Casa Blanca. “Después de 20 años, he aprendido por las malas que nunca es un buen momento para retirar las fuerzas estadounidenses”.
Biden afirmó que Estados Unidos continuará luchando contra el terrorismo en Afganistán incluso después del retroceso, y señaló que la medida demostró que estaba cumpliendo su compromiso con el personal militar para poner fin a la guerra en Afganistán.
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Indicó que el expresidente Donald Trump, después de llegar a un acuerdo con los talibanes el año pasado en Qatar, ya había reducido la presencia de EE.UU. en el país a una fracción de su tamaño anterior.
“La elección que tuve que tomar como su presidente fue cumplir con ese acuerdo, o estar preparado para volver a luchar contra los talibanes en medio de la temporada de combates de primavera”, dijo Biden.
Caos aeroportuario
El lunes, Biden regresó de Camp David, Maryland a una tormenta política tras la impactante toma de Afganistán por los talibanes y el caótico esfuerzo por evacuar al personal estadounidense.
En sus comentarios, expuso los pasos que estaba tomando su Administración para hacer frente a la crisis, incluida la toma del control del tráfico aéreo, garantizar la operación de vuelos civiles y militares para evacuar a miles de estadounidenses en los próximos días, así como aumentar la asistencia a ciudadanos afganos que solicitan asilo en EE.UU.
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Los acontecimientos provocaron críticas generalizadas sobre el manejo de la reducción de tropas que el presidente anunció a principios de este año. Los vuelos que salían del aeropuerto de Kabul se detuvieron temporalmente en medio de violaciones de seguridad, en tanto que los afganos desesperados por escapar de los talibanes invadieron aviones militares estadounidenses.
En las últimas semanas, Biden había expresado su confianza en esas mismas fuerzas de seguridad, prediciendo una retirada tranquila y ordenada y descartando preguntas sobre las preocupaciones dentro de la comunidad de inteligencia y el ejército sobre la creciente fuerza de los talibanes.
