Funcionarios estadounidenses están trabajando para concertar una posible llamada este verano entre el presidente Joe Biden y el presidente chino, Xi Jinping, según dos personas en Washington familiarizadas con los planes, en un momento en que las tensiones entre las dos economías más grandes del mundo son altas.
Las personas no tenían más detalles sobre lo que Estados Unidos querría que fuera el foco de la llamada, pero altos funcionarios de la Administración Biden han enfatizado la importancia de poner “salvaguardas” en la relación con Pekín.
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Ucrania, Taiwán y los derechos humanos se encuentran entre los puntos delicados de la relación entre EE.UU. y China, y las dos naciones han estado compitiendo por una mayor influencia en la región del Indo-Pacífico.
Una persona familiarizada con la planificación de una posible llamada en el verano dijo que cualquier reunión en persona de los dos líderes no se realizaría antes del congreso del Partido Comunista de China a fines de año.
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Una portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca dijo el jueves que la Administración Biden sigue manteniendo abiertas las líneas de comunicación para gestionar la competencia con China, pero que no tenía llamadas ni reuniones futuras que anunciar en este momento.
Biden y Xi hablaron por última vez en una videollamada de casi dos horas el 18 de marzo, la primera después de la invasión rusa a Ucrania. El presidente de EE.UU. advirtió a su homólogo en ese momento de “consecuencias” en caso de que Pekín brindara apoyo a la guerra del presidente Vladímir Putin, según el reporte de la Casa Blanca sobre la reunión.
