El presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro, dijo que podría abandonar sus planes para fusionar los ministerios de agricultura y medio ambiente tras recibir críticas de activistas, líderes agrícolas e incluso de la supermodelo Gisele Bündchen. "Estoy dispuesto a dar marcha atrás si es necesario", dijo Bolsonaro a los medios en Río de Janeiro. "Queremos conservar el medio ambiente, pero no de la manera radical que se ha hecho recientemente".
Bolsonaro había considerado la fusión de los dos ministerios de acuerdo con un plan para reducir el tamaño del Estado. La propuesta generó críticas de activistas en defensa del medio ambiente por el temor a que esto resultase en la deforestación de la selva amazónica. El ministro de Agricultura, Blairo Maggi, advirtió que las exportaciones brasileñas podrían sufrir en mercados que han comenzado a exigir prácticas sostenibles. Y Bündchen le pidió que no diera marcha atrás a "décadas de lucha por los bosques".
"Podría ser desastroso y un camino sin retorno", escribió Bünchen en Twitter. "El mundo necesita el Amazonas y otros bosques para el equilibrio climático y la agroindustria también necesita la preservación del bosque para garantizar condiciones mínimas a fin de mantenerse fuerte en el futuro".
Gisele ha sido una detractora destacada de la decisión del presidente Michel Temer el año pasado de permitir actividades mineras dentro de una reserva del Amazonas. Al final Temer dio marcha atrás a su plan. Bolsonaro expresó repetidamente su deseo de expandir la minería en la Amazonia.
