El Congreso de Ecuador pospuso hasta el martes una votación sobre la destitución del presidente promercado Guillermo Lasso después de que este anunció recortes en el precio del combustible en un intento por apaciguar a los manifestantes.
El Parlamento concluyó una segunda noche consecutiva de debate sobre el futuro de Lasso en el cargo sin una votación. Los problemas políticas del mandatario surgen tras dos semanas de violentas protestas en todo el país por los precios del combustible y el alto costo de vida.
Continúan las protestas en Ecuador y escala la tensión social
El partido de oposición de izquierda Revolución Ciudadana, cercano al expresidente Rafael Correa, busca destituir a Lasso con el argumento de que el país enfrenta una grave crisis, una disposición constitucional que permite la destitución del mandatario. Si bien el grupo lidera el dividido Congreso de Ecuador con 47 escaños, no está claro que la moción alcance los 92 votos necesarios para derrocar a Lasso.
Lasso, quien asumió el cargo hace un año, está lidiando con los disturbios a medida que los manifestantes liderados por grupos indígenas han paralizado partes del país y amenazan la producción de petróleo desde mediados de junio. Los manifestantes exigen una reducción en los precios del combustible, una moratoria sobre nuevos proyectos petroleros y mineros y la suspensión de los planes para privatizar los activos del Gobierno.
El domingo por la noche, el presidente intentó apaciguar a los manifestantes al anunciar una reducción en los precios de la gasolina y el diésel en 10 centavos por galón. La gasolina de bajo octanaje bajará un 4% a US$2,45 por galón, mientras que el diésel caerá un 5,3% a US$1,8 por galón, cubriendo parcialmente sus demandas.
Lasso y las patologías de la democracia ecuatoriana
“Todos consideran que el precio de los combustibles se ha convertido en la piedra angular que mantiene el conflicto”, expresó el presidente en un breve discurso a la nación desde Quito. “Aunque como Gobierno tenemos muy claro que este factor no es el que origina los problemas de los ecuatorianos, debemos pensar en el bien común y la paz ciudadana”. Repitió su compromiso de restaurar legalmente el orden.
El movimiento de la oposición para acusar al presidente se reanudó el domingo después de haber comenzado el sábado por la noche. Varios partidos de todo el espectro político han rechazado hasta ahora el intento de destitución. Si Lasso es destituido, sería reemplazado por el vicepresidente Alfredo Borrero, mientras se organizan las elecciones para reemplazarlo.
La nación andina sigue un programa con el Fondo Monetario Internacional, que el 24 de junio dijo que entregará inmediatamente el equivalente a US$1.000 millones a Ecuador tras concluir las revisiones del acuerdo de facilidad extendida del país.
