Después de luchar contra fuerzas de seguridad que intentaban mantenerlo a él y a legisladores aliados fuera del Parlamento, el líder de la oposición venezolana, Juan Guaidó, logró ingresar a la Asamblea Nacional y dar inicio a la primera sesión legislativa del año.
Más temprano, el grupo progubernamental dirigido por Luis Parra, que se adjudicó la presidencia, intentó celebrar una sesión sin quórum.
Guaidó subió a la tribuna de la Asamblea y tomó el micrófono mientras legisladores de oposición entonaban el himno nacional. Parra y otros parlamentarios socialistas ya habían abandonado el hemiciclo. Los legisladores, a través de una votación, reconocieron la reelección de Guaidó como jefe de la Asamblea Nacional para 2020 y rechazaron el intento de Parra por reclamar la función.
En un momento, se cortó la electricidad en la Asamblea, lo que llevó a los parlamentarios a leer la lista de asistencia con la ayuda de las luces de sus teléfonos móviles y sin micrófonos.
“No son los militares quienes deciden el ingreso a la Asamblea, es el pueblo”, dijo Guaidó.
El intento por asumir el liderazgo de lo que fue la última institución democrática en Venezuela ha profundizado el conflicto entre el presidente Nicolás Maduro y el opositor Guaidó, que el año pasado fue reconocido como el líder legítimo del país por más de 50 países. El Gobierno aún no ha comentado sobre los incidentes que llevaron a que Guaidó regresara el martes a la Asamblea.
Parra, quien fue mencionado en un caso de soborno por intentar hacer presión a favor de empresarios progubernamentales involucrados en un programa de alimentos, afirma haber sido elegido legítimamente como el nuevo jefe de la Asamblea Nacional el 5 de enero.
Guaidó, por su parte, dijo que fue reelegido el mismo día por 100 legisladores en una votación que se celebró en una improvisada sesión fuera del Parlamento después de que se le prohibiera ingresar al Congreso.
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