Elon Musk ha expresado su total apoyo a Tesla Inc. en un conflicto laboral en Suecia, afirmando que es “una locura” cómo una huelga que afecta a siete talleres de reparación se ha extendido para obstaculizar las operaciones de la empresa en el mayor país nórdico.
Estibadores, recolectores de basura, electricistas y trabajadores de correos se niegan a realizar cualquier tarea relacionada con Tesla, después de que sus grupos sindicales intervinieran para apoyar al sindicato de trabajadores industriales sueco IF Metall, que ha estado en huelga desde el 27 de octubre. Nueve sindicatos ahora forman parte del bloqueo al fabricante de vehículos eléctricos.
Los sindicatos suecos tienen amplios derechos, consagrados por ley, para unirse a acciones en nombre de sus compañeros. En cambio, en otros países europeos, medidas similares están estrictamente reguladas o totalmente prohibidas.
La protesta de los trabajadores postales irritó específicamente Musk. La medida ha impedido que la Agencia Sueca de Transporte entregue matrícula para los nuevos automóviles de Tesla, ya que, según la normativa, las entregas solo se pueden hacer por correo. Esto significa que nuevos Tesla no podrán circular en Suecia.
El director ejecutivo y cofundador del fabricante de automóviles tuvo conocimiento del hecho en una publicación en X, la plataforma de su propiedad antes conocida como Twitter, lo que provocó su respuesta: “Esto es una locura”.
Su intervención subraya cómo las partes en conflicto se están atrincherando.
Elon Musk en el centro de una tormenta por un posteo antisemita en X
Las negociaciones se paralizaron cuando las huelgas en los talleres de reparación están a punto de entrar en su quinta semana. El principal mediador entre las dos partes declaró el martes al diario económico sueco Dagens Industri que la filial de Tesla en Suecia tiene “cero margen de maniobra” para firmar cualquier acuerdo con el sindicato, y afirmó que sigue “órdenes directas de Elon Musk”.
Traducido por Paulina Munita.
