El presidente Donald Trump prometió presionar por un cierre del gobierno para obtener fondos para un muro fronterizo, independientemente de las consecuencias políticas en medio de los temores de legisladores republicanos de que un cierre antes de las elecciones de noviembre podría dañar al partido. "No me importa cuáles sean las ramificaciones políticas", dijo Trump en un tuit el martes. "Nuestras leyes de inmigración y seguridad fronteriza han sido un desastre total y completo durante décadas, y no hay forma de que los demócratas permitan que se solucione sin un cierre del gobierno".
El mandatario agregó en otro tuit que el cierre del gobierno "es un precio muy bajo que hay que pagar". Las declaraciones duplicaron las amenazas que hizo en tuits durante el fin de semana y en una conferencia de prensa el lunes en la Casa Blanca. La página editorial del diario The Wall Street Journal, influyente en los círculos republicanos, respondió al calificar la jugada como "la estrategia de Trump para perder la cámara baja".
Los republicanos en el Congreso planean retrasar una pelea por el muro fronterizo del presidente hasta después de las elecciones de noviembre. El presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, y el líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, mantienen su estrategia de completar el financiamiento de todo el año para la mayoría de las agencias antes del inicio del próximo año fiscal el 1 de octubre. Dicen que esperarán hasta más adelante para buscar US$5.000 millones para el muro en la frontera entre Estados Unidos y México.
