El vicepresidente de Brasil, Hamilton Mourão, viajará a China en busca de inversiones en infraestructura, lo que implica que el gobierno amplía su ofensiva internacional sobre la materia.
Mourão buscará capital para carreteras, ferrovías y puertos cuando se reúna a fines de mayo en Pekín con su homólogo chino, Wang Qishan, según un funcionario del gobierno brasileño. Mantener relaciones positivas con China es una prioridad para el vicepresidente, que también se reunirá con empresarios y funcionarios de gobierno en Italia y Alemania.
Brasil: las exportaciones de soja alcanzarían un nuevo récord en enero
Desde su investidura en enero, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha matizado sus comentarios críticos sobre China, el mayor socio comercial de su país. En un contexto de caída de las proyecciones de crecimiento y varias crisis políticas internas, el gobierno brasileño está ansioso por proyectar una imagen positiva a los inversionistas internacionales cortejados en medio de planes orientados a vender US$20.000 millones en activos en 2019.
Bolsonaro se comprometió a visitar China este año y también extendió una invitación para que el presidente Xi Jinping participe en la cumbre del grupo BRICS, que reunirá en noviembre a representantes de los mercados emergentes más grandes del mundo. China está abierta a concretar acuerdos comerciales y de inversión con Brasil, señaló el mes pasado en una entrevista el nuevo embajador chino en Brasilia.
