Esta instancia inicial de la inauguración del gasoducto deja algunos interrogantes de carácter económicos. Para hablar de eso, nos comunicamos con Jorge Lapeña, ex secretario de Energía y presidente del Instituto Argentina General Mosconi.
Para Lapeña: “El verdadero impacto de lo que puede producir el gasoducto es un mayor aporte de gas proveniente de la Cuenca Neuquina, de forma tal de que la inauguración en esta primera etapa brinde un aporte de más de 11 millones de metros cúbicos más de gas por día que se suman a la oferta y representan más o menos un 7% del consumo medio de la Argentina”.
Cuál será el efecto positivo y cuándo comenzará a producir
Y añadió que ,va a tener un efecto positivo porque va a permitir reducir en principio un volumen similar de importaciones de gas que se realiza a través del puerto de Bahía Blanca.
Con respecto al tiempo en que habrá que esperar para el aporte inmediato, Lapeña afirmó: “Esto fue una inauguración parcial, que va a tener una longitud total de 1100 km aproximadamente, porque va a llegar a hasta la provincia de de Santa Fe en la localidad de San Jerónimo”. Y agregó que falta construirlo y ponerlo en marcha, es decir, “le falta un tiempo considerable”.
Sin embargo, sostuvo que, “se tienen que poner en marcha las plantas compresoras que permiten incrementar la presión del gasoducto y consecuentemente trasladar o transportar un mayor volumen y pasaría de 11 millones de metros cúbicos por día a 21 millones”.
A qué países se podrá exportar gas
Con respecto a la posible exportación, el entrevistado sostuvo que: “la posibilidad de exportar está circunscrita a la región en la cual están clavadas la Argentina y particularmente Vaca Muerta. Sin embargo tenemos una gran posibilidad de exportar a Chile con los gasoductos que fueron construidos hace 20 años y que están paralizados”. “Además, tenemos todo el mercado uruguayo y existe una posibilidad regional de abastecer a Brasi”, agregó.
Para finalizar, Lapeña se refirió a la posibilidad de exportar a Europa y fue contundente: “No creo en este momento, pensar que Argentina pueda en lo inmediato abastecer a una Europa en guerra”.
