Comienza una nueva etapa en la Argentina, pero desde hace tiempo se habla de las múltiples diferencias a la hora de cerrar negociaciones y acuerdos entre el Mercosur y la Unión Europea. Para hablar sobre esta temática, Canal E junto al analista político Eduardo Reina se comunicaron con Félix Fernando Shaw, director para América Latina y el Caribe de Unión Europea.
Mercosur - Unión Europea: un "buen acuerdo"
“La Comisión Europea tiene un mandato claro de todos los Estados miembros de la Unión Europea de negociar y terminar el acuerdo del Mercosur lo antes posible”, comenzó Shaw.
“Vamos a trabajar con todo el que venga porque pensamos que el acuerdo Mercosur - Unión Europea es un buen acuerdo para todos, aunque evidentemente hay algunos sectores que pueden estar más o menos favorecidos”, continuó.
En ese mismo contexto, Shaw explicó que, al ser un acuerdo que beneficia ambas regiones, la Unión Europea “no va a dejar su intento de conseguir terminar y finalizarlo pero también depende de que los socios del Mercosur quieran este acuerdo. “Creo que hay una buena predisposición por parte de todos y lo que vamos a intentar es acabarlo lo antes posible porque ya llevamos mucho tiempo”, añadió.
Impedimentos para cerrar acuerdos
Al ser consultado sobre cuáles son los puntos críticos por los que todavía no se puede alcanzar un acuerdo, Shaw explicó que son las últimas medidas y el impacto que puede tener en determinados sectores industriales en ambos lados. “Hubo nuevas regulaciones del lado europeo y también del Mercosur”, expresó el entrevistado y aseguró que “ambas partes están poniendo encima de la mesa las distintas ideas y ofertas que tenemos para encontrar un punto medio que pueda satisfacer a ambos lados”.
Según Shaw, la Unión Europea cree en el libre comercio, “lo creen para sí mismos y entre sí mismos y lo creen en el exterior y estos yo creo que es uno de los acuerdos más importantes y más beneficiosos para ambas, regiones”.
En ese mismo contexto, sostuvo que hay muchas razones de peso económico, sobre todo por el mundo al que “nos dirigimos”, “que no es el mismo que cuando empezamos a negociar con el Mercosur”, donde se habla de transición energética, impacto social, medioambiental y “donde las cadenas de valor tienen que contribuir a la descarbonización”.
Para finalizar, expresó: “La transición energética entre el Mercosur y la Unión Europea puede ser buena para nosotros y para el resto del mundo. Por lo tanto la Unión y los 27 estados miembros, más allá de que alguno tenga un problema con otro, cuando alcancemos el acuerdo, nosotros le pondremos a todos los sus responsabilidades y les diremos lo que ha negociado”.
