Efecto sequía: los campos debieron adelantar los procesos de faena debido a la falta de pasto
“El problema lo vamos a tener en septiembre/octubre donde todo esto que se está adelantando va a faltar y ahí es donde se van a ir acomodando los precios”, adelantó el presidente de CAMyA, Sergio Pedace.
Sergio Pedace: "Este gobierno siempre habla con los frigoríficos y le pide que siempre haya algo de carne barata en los supermercados" |
Télam
La sequía fue un factor que afectó en gran medida las cosechas del campo y eso derivó en la caída de la economía argentina. Por otro lado, la falta de lluvia repercutió en la industria ganadera ya que por la falta de pasto se tuvieron que adelantar las faenas de carne vacuna. Ante este acontecimiento, este medio se contactó con Sergio Pedace, vicepresidente de CAMyA.
“La gente está consumiendo más carne bovina, estamos en 50 kilos per cápita. Eso se debe a que hay mucho ofrecimiento de hacienda en base a esta sequía que dejó sin pasto a los campos y adelantó los procesos de faena”, comentó Pedace. “El problema lo vamos a tener en septiembre/octubre donde todo esto que se está adelantando va a faltar y ahí es donde se van a ir acomodando los precios. Estamos entre un 50 y un 70% atrasados con la inflación”, adelantó.
La sequía afectó el desarrollo natural de los vacunos
Posteriormente, Pelace sostuvo que al haber una sequía, “los campos dejan de tener pasturas, por lo tanto, no se dan las condiciones para que los terneros cuando nacen puedan estar en ese campo y recriarse”. Con esta falta de pastizal como referencia, explicó: “Hoy estamos teniendo animales de 350 kilos para poder faenar y estamos muy abastecidos. Sin embargo, ese animal de 350 kilos tendría que haber salido con 450 o 500 kilos y tendría que haber salido dentro de 2 meses”.
Con respecto a quien tironea más entre las exportaciones y el consumo interno, el vicepresidente de CAMyA dijo que depende de la “oferta y demanda” y principalmente, se tiene en cuenta los precios de exportación: “Si la exportación puede pagar más, el consumo interno, en vez de vender 50 kilos de carne por persona, va a consumir 40. Estaría bueno que todos los frigoríficos de la Argentina pudieran faenar para poder exportar y para poder compensar algunos precios”.
El protagonismo del gobierno frente a los frigoríficos
“Este gobierno siempre habla con los frigoríficos y le pide que siempre haya algo de carne barata en los supermercados”, declaró el entrevistado de cara a la petición del gobierno a los frigoríficos. “Los precios cuidados no llegan a los barrios humildes, llegan a las grandes cadenas de supermercados que es donde los exportadores tienen sus clientes”, concluyó.
