Con el inicio de mayo, los usuarios de servicios públicos enfrentan nuevos aumentos en sus facturas de electricidad y gas. En este sentido, este medio se contactó con Fernanda Lacey, abogada de la Unión de Usuarios y Consumidores, quien explicó en detalle el impacto de estas subas, el esquema de subsidios vigente y la incertidumbre que atraviesa a millones de hogares.
Aumentos en las distribuidoras de servicios
“Se establecieron incrementos en el valor de distribución de alrededor del 15-16% para las distribuidoras, pero se van a aplicar en 30 meses para que el impacto no sea directo”, explicó Fernanda Lacey. Este aumento representa entre un 0,38 y un 0,5% mensual para luz y gas, respectivamente. A esto se suma un ajuste adicional vinculado al índice de precios al consumidor, lo que podría llevar los aumentos a un 2,5 o 3% mensual.
Desde la mirada de los usuarios, este esquema genera una fuerte incertidumbre. “Nos preocupa bastante porque no se sabe de antemano cuál va a ser ese incremento. Además, la medición es bimestral pero la facturación es mensual, así que el usuario no sabe cuánto le va a venir el mes que viene”, subrayó.
El impacto de los aumentos en los usuarios
En ese marco, la eliminación progresiva de subsidios sigue siendo una prioridad del Gobierno. “Los usuarios de ingresos altos, los del nivel 1, ya no reciben ningún tipo de subsidio”, aclaró Lacey. El beneficio solo se mantiene para los niveles 2 y 3, ingresos bajos y medios, aunque con condiciones cada vez más estrictas. “El subsidio actual es solo en la generación de energía, no en la distribución, y existe un tope de consumo que reduce aún más la cobertura”, detalló.
Luego, manifestó que el impacto de los aumentos ya es significativo: “De diciembre de 2023 a marzo de 2025, el incremento fue de aproximadamente el 400%”. Además, el diseño tarifario actual es complejo, ya que conjuga nivel de ingresos con consumo. “Muchas veces los hogares de menores ingresos tienen electrodomésticos menos eficientes, lo que implica un consumo mayor. Una estufa eléctrica de radiador, por ejemplo, consume más del doble que un aire acondicionado frío/calor”, explicó.
Cuánto paga una familia tipo por los servicios de luz y gas
La abogada también cuestionó la falta de implementación de la “canasta básica energética”, una promesa del inicio de la gestión actual. “Nunca llegó a aplicarse. Era un esquema interesante porque tomaba en cuenta el concepto de pobreza energética, que define como pobre a quien destina más del 10% de sus ingresos familiares a pagar energía”, sostuvo.
De cara a los próximos meses, el panorama para los usuarios de ingresos medios es incierto. “Según trascendidos periodísticos, se eliminaría la categoría N3, lo que dejaría fuera del subsidio a unos 4 millones de usuarios”, alertó. Estos hogares, que actualmente tienen ingresos familiares entre 800.000 y $3.000.000, podrían ver incrementado su gasto mensual de forma drástica. “Una familia tipo hoy paga entre 120.000 y $150.000 mensuales por servicios públicos. Si se elimina el subsidio, el impacto será muy fuerte”, advirtió.
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