El director de LATAM Advisors, Sebastián Maril, conversó con Canal E y evaluó la situación económica y política de Argentina en el marco de las negociaciones del ministro de Economía, Luis Caputo, y del presidente del Banco Central, Santiago Bausili, con funcionarios del Tesoro estadounidense y del FMI.
Sebastián Maril destacó el objetivo central del oficialismo: “El Gobierno está intentando recuperar el control de la agenda económica, sabiendo que el control de la agenda política probablemente no lo vuelva a recuperar hasta después de las elecciones. Motivo por el cual lo que intenta con estos anuncios, que estamos por ver realmente el contexto y el contenido de esos anuncios, es que la economía no sufra más sobresaltos de acá del 26 de octubre”.
Preocupación por el regreso de la oposición
Y agregó: “La población, el electorado, muestra cierta preocupación por el regreso de las políticas económicas y sociales que votamos en contra hace dos años y, por lo menos, darle beneficio a dudas al presidente Milei de que los próximos dos años queremos que decida el camino”.
Sobre la visión de los grandes bancos internacionales tras sus visitas al país, Maril planteó: “En las últimas cuatro semanas, desde la elección de la provincia de Buenos Aires, el Berkley no ha sido el único banco que ha pasado por acá, ha estado de Goldman Sachs, Bradesco de Brasil, y todos concluyen lo mismo, nada va a calmar a los mercados, excepto un buen resultado el 26 de octubre”.
Asimismo, describió un escenario volátil y de escasa confianza: “Puede haber periodos prósperos muy temporarios, lo vimos con el anuncio del Tesoro Norteamericano, que la euforia duró tres días y después todo volvió a foja cero. Y mucho está por verse, porque cada vez que salimos de un escándalo nos metemos en otro y eso realmente perjudica a la Argentina”.
El impacto de la política en la economía
Por otro lado, el entrevistado remarcó: “No importa quién sea el presidente o la oposición, la política siempre perjudica a la economía y una economía perjudicada o debilitada destruye proyectos políticos”.
Luego, manifestó que el foco de los inversores está puesto en la estabilidad económica más que en los gestos políticos: “Todo pasa por la economía actualmente, sabiendo que el control de la agenda política probablemente lo haya perdido hasta octubre”.