Finalmente comenzó la segunda fase del plan económico del Gobierno, donde se planea cerrar la canilla de la emisión por completo y a eso se le suma el apuro que se tuvo que ejercer debido a la falta de reservas que viene teniendo el Banco Central. En relación a este tema, este medio se puso en contacto con el economista, Leonardo Anzalone.
“El Gobierno tiene un objetivo muy claro que es bajar la inflación y, en función de eso, comenzó la fase 2 de este programa que es el cierre de otra canilla de emisión monetaria”, comentó Leonardo Anzalone. “Esta fase 2 requiere una pericia distinta a lo que hizo el Gobierno los primeros 6 meses, donde ha conseguido, en términos económicos, buenos resultados”, agregó.
A qué se debe el apuro en implementar la segunda fase del plan económico
Posteriormente, Anzalone planteó: “Que el Banco Central no pudiera acumular reservas fue lo que aceleró la nueva etapa del programa que tiene que ver con estas famosas LEFI”. Luego, manifestó que, “lo más importante, y donde empezaron a haber algunos problemas, es la sintonía del Gobierno para con el propio Gobierno, porque se empezaba a percibir que el ministro de Economía decía una cosa y el Presidente otra”.
“Una cosa es la campaña y otra cosa es la gestión, si las variables económicas se escurren entre los dedos, se tienen que tomar decisiones en función a eso que se está viendo”, sostuvo el entrevistado, que después completó: “El ministro Caputo es quien tiene todos los días la lista de precios, ve cómo se mueven las reservas y, en función de eso, va tomando decisiones, el resto son consideraciones políticas”.
El Gobierno debió tomar decisiones para no “perder” ante el mercado
Por otro lado, el economista señaló: “El Gobierno hace cosas distintas a las que dijo en campaña y si uno no toma determinadas decisiones, el mercado termina ganando”. A su vez, remarcó que, “parecería que el Gobierno lo que está tratando de hacer es conseguir un puente a febrero/marzo del año que viene en función de las elecciones en Estados Unidos”.
“Todos escuchamos en algún momento decir al Presidente que el peso era excremento y cuando uno escucha al ministro Caputo, lo que hace es todo lo contrario, es hablar de que el peso va a ser una moneda muy fuerte”, expresó Anzalone. Para finalizar, expresó: “Esas inconsistencias hicieron que durante las últimas semanas, el mercado estuviera muy nervioso”.
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