El virus de la gripe evoluciona y, para hacerle frente en forma efectiva, la vacuna antigripal de 2015 llegará con una nueva formulación. Así, los 9 millones de dosis que llegarán a la Argentina antes de esta temporada invernal tendrán componentes virales diferentes a los de la vacuna del año pasado.
La inyección antigripal de este período cambiará dos de las tres cepas que usualmente la componen. Y ese reemplazo mayor es el principal responsable de tener que realizar ajustes a todo el proceso de producción. Por lo tanto, las vacunas estarán disponibles para iniciar la campaña anual de prevención durante el próximo abril.
Todos los años, epidemiólogos de los países miembros de la Red Global de Vigilancia de Influenza de la OMS –que en el hemisferio sur incluye Argentina, Brasil, Chile y Uruguay, entre otros– se encargan de realizar un seguimiento del virus en sus respectivas naciones. Luego, a partir de ese análisis, expertos de la OMS emiten recomendaciones sobre la composición de las vacunas antigripales que se fabricarán para la siguiente temporada.
Esta vez, las sugerencias de la OMS determinaron que la nueva versión incluya la cepa Influenza A H3N2 e Influenza B, mientras que mantendrá la cepa de la Influenza A H1N1 incluida en la composición desde la pandemia de 2009.
“La actualización periódica de las cepas incluidas en las vacunas antigripales es necesaria para que sean eficaces teniendo en cuenta la evolución constante de los virus Influenza”, explicó la doctora Carla Vizzotti, responsable del Programa Nacional de Control de Enfermedades Inmunoprevenibles del Ministerio de Salud de la Nación.
Según el informe de los CDC (Centros de Control y Prevención de Enfermedades) esta temporada de invierno, en Estados Unidos, se registró una mayor cantidad de casos e internaciones. Y el 94,8% de los virus de Influenza analizados fue atribuido a la cepa Influenza A H3N2.
“Las vacunas que actualmente se están aplicando en el hemisferio norte no contienen las dos nuevas cepas que sí estarán en la formulación de las que se distribuyen ahora en el hemisferio sur”, detalló la especialista.
La aplicación de la vacuna antigripal generalmente comienza en marzo, pero los cambios de componentes impactaron en los tiempos de producción y distribución. “Las nuevas cepas tienen características complejas y fue todo un desafío realizar la producción desde cero”, describió Pablo Bonvehí, jefe de Infectología del Cemic y ex presidente de la Sociedad Argentina de Infectología. En 2014, en el Boletín Integrado de Vigilancia se notificaron en el país 990.505 casos de Enfermedad Tipo Influenza, lo que significa el 18,2% menos respecto de 2013.
