Los problemas para la NASA no terminan. A la preocupación general sobre si es necesario efectuar una complicada reparación del escudo térmico dañado sucedida durante el lanzamiento del transbordador Endeavour, hoy sus astronautas debieron suspender el trabajo que tenían en la Estación Espacial Internacional (EEI), debido a la rotura en un guante del ingeniero Rick Mastracchio, mientras realizaba una reparación.
Constatado el daño en el guante del astronuata, desde la base de la misión en Houston se ordenó el retorno de los astronautas a la cámara de descompresión de la EEI. La NASA explicó que se trató de una medida de precaución y que Mastracchio se encuentra fuera de peligro. La perforación en el guante no penetró más que dos de las cinco capas que lo componen.
El recorte de la caminata espacial no afectó el trabajo programado en la ISS porque los astronautas habían finalizado todas las tareas previstas una hora antes del plazo fijado.
Lo que verdaderamente preocupa a los expertos en la NASA, es completar las verificaciones de sus cálculos y modelos aerodinámicos y térmicos con otros institutos independientes, sobre las probables consecuencias de la fisura de 8,75 cm por 5 cm en el escudo térmico de la nave espacial.
La grieta en el escudo térmico del transbordador se generó al golpear contra la nave un trozo de aislante desprendido del tanque de combustible externo 58 segundos después del lanzamiento el 8 de agosto. Una fisura muy extendida podría generar un accidente como el del Columbia en 2003, que se desintegró con sus siete tripulantes al regresar a la Tierra.
Esa catástrofe fue provocada por una fisura en la protección térmica del ala izquierda del transbordador, producto del impacto de un trozo de espuma aislante también desprendido durante el ascenso. Con todos los análisis y resultados a la vista " somos prudentemente optimistas de que la nave puede volver a la tierra en estas condiciones", señaló este martes John Shannon, responsable de la misión.
La NASA teme que a pesar que esta pequeña fisura no amenaza ni al trasbordador ni a su tripulación en su regreso a la atmósfera, podría, no obstante, producir un retraso en el programa de lanzamientos de transbordadores ya que la reparación del Endeavour una vez en la Tierra llevará su tiempo.
El próximo vuelo está previsto para el 20 de octubre y el siguiente para el 6 de diciembre, para integrar a la ISS el laboratorio europeo Columbus. Además, aunque esta misma reparación sin precedentes sea simple -se trata de taponear una cavidad con una pasta tal como rellenamos un hoyo en una pared con yeso- los riesgos de provocar daños mucho más serios no son de despreciar.
Colgados y atados a los pies a la extremidad de 15 metros del brazo robótico, los astronautas podrían por error golpear con sus cascos o herramientas las tejas térmicas muy frágiles, quebrándolas. Ellos trabajan dentro de una esca fandra espacial de 136 kilos y llevan con ellos 68 kg de instrumentos. Si la NASA decide reparar la fisura, los astronautas realizarán la reparación probablemente el viernes, luego de la cuarta salida orbital del programa. Si más tiempo es necesario, los responsables de la misión podrían determinar una prórroga y que la nave permanezca en el espacio junto a la ISS un día más de lo previsto y efectuar la reparación el sábado.
La NASA dispone de tres métodos para reparar la fisura. Cuentan con una pintura que refleja el calor, una pasta para taponear y una placa que puede recubrir toda la zona dañada. Este última opción ya fue descartada porque la cavidad es demasiado pequeña, según John Shannon. Solamente la pintura fue puesta a prueba en el vacío del espacio.
La NASA prevé realizar 12 vuelos más de transbordador para terminar la ISS hacia 2010, año programado para el retiro de la flota de tres transbordadores.
Fuente: AFP