Si la noche está despejada, el rating de los programas de televisión enfrentará mañana, a partir de las 21.11, una fuerte competencia. Es que a esa hora comenzará a verse en el cielo nocturno uno de los fenómenos astronómicos que fascinan a millones de espectadores de todo el mundo, desde hace miles de años: un eclipse total de Luna. Además, la alineación que se producirá mañana por la noche, cuando la Tierra se interponga entre la luz del Sol y la Luna, no causará un eclipse común, sino que nuestro satélite se exhibirá en un formato extragrande.
“La órbita lunar no traza una circunsferencia, sino que es una elipse y por eso la Luna se ubica a lo largo de su trayectoria a diferentes distancias de la Tierra”, explicó el astrónomo Diego Bagú, director de Gestión del Planetario de La Plata. Y agregó que “una vez por mes pasa por su perigeo, la distancia más cercana a la Tierra. En algunas ocasiones se da la coincidencia en que la Luna alcanza esta posición cuando se encuentra en su fase de Luna llena. Y esto permite que pueda observarse hasta 14% más grande que una Luna llena ‘ordinaria’”. De hecho, los astrónomos la suelen denominar “superluna”.
Justamente, en la noche del domingo, nuestro satélite natural se verá como una superluna, porque no sólo atraviesa su fase de Luna llena, sino que también estará en su perigeo. “Es más –describió en su blog Guillermo Abramson, físico de la CNEA, responsable de una de las páginas de astronomía para aficionados más reconocidas de habla española y autor de libros de divulgación sobre el espacio–, la de este fin de semana será una ‘super-superluna”’.
¿Por qué? “Resulta que no todos los perigeos son iguales. La órbita lunar tiene pequeñas variaciones principalmente debido a la influencia del Sol. Y así hay perigeos más cercanos y otros más lejanos a la Tierra, en un ciclo que se repite cada pocos meses a medida que nuestro planeta se mueve alrededor del Sol junto con la Luna. El próximo perigeo será particularmente cercano porque la Luna llegará a estar a poco más de 350 mil kilómetros de la Tierra”, explicó.
El momento más atractivo del eclipse ocurrirá a partir de las 23.11, cuando el derrotero del satélite lo coloque en la zona de umbra, el cono de sombra generado por la Tierra que impide el paso de los rayos del Sol. Este momento se extenderá hasta la 00.23 del lunes.
Durante el espectáculo, la Luna se verá teñida de tonos rojizos. Este se genera porque estará bañada por una débil refracción de los rayos solares que atraviesan la atmósfera terrestre.
Esta facilita el paso de la luz, cuya longitud de onda se corresponde con el rojo.
Las personas que quieran observar este fenómeno astronómico acompañado de explicaciones de profesionales y utilizando telescopios y binoculares especiales pueden acercarse al planetario Galileo Galilei de la Ciudad de Buenos Aires; al planetario de la ciudad de La Plata y también al observatorio astronómico de la Universidad Nacional de Córdoba. Los tres tienen previstas actividades especiales: charlas de astrónomos y observar el eclipse acompañados de buena música.
