Las inundaciones que golpean al sur de la provincia, generaron un tembladeral en materia política. El agua no baja y uno de los funcionarios apuntados por la apremiante situación que se vive en esa zona ha sido Osvaldo Vottero, titular de Vialidad Provincial a quien la oposición responsabiliza de no escuchar a los productores a tiempo cuando la magnitud del desastre aún no alcanzaba el nivel actual. El legislador radical Miguel Nicolás y el intendente de Arias, Matías Gvozdenovich, encabezaron los reclamos contra el titular de Vialidad y pidieron su r
renuncia tras la crisis hídrica que vive el sudeste cordobés.
Visiblemente molesto por los dichos de la oposición, Vottero recibió a PERFIL CORDOBA y reconoció que las críticas le afectan aunque considera que “se está haciendo carroña política” con el sufrimiento de la gente en una zona que está muy afectada.
“Me parece denigrante mezclar la política con una tragedia como ésta que tiene que ver con una multicausalidad. Yo entiendo a los vecinos porque se da una paradoja. En el mismo espacio donde un productor está lleno de agua, al lado la soja rinde 50 quintales. Como no entender esa bronca del productor que tiene un bajo natural y tiene todo el campo bajo el agua mientras que el vecino cosecha con rindes excepcionales. Ese productor está enojado conmigo, con el mundo y lo entiendo”, expresó Vottero.
-¿Las críticas de parte de otros funcionarios también las entiende?
Soy un hombre de la democracia. Hace mucho que estoy en política y esto es un golpe bajo. Nosotros teníamos problemas en 800 mil hectáreas, hoy son 180 mil las hectáreas anegadas. Si no hubiéramos hecho nada, tendríamos 1 millón trescientas mil hectáreas bajo el agua. Estamos brindando soluciones concretas, trabajando. A esta altura, el año pasado teníamos cuatro rutas provinciales cortadas por el agua y hoy todas están transitables. Me parece de mal gusto cuando hay una sensación de pérdida y dolor querer mezclar cuestiones que no son de fondo. Acá hay que dar soluciones.
-La oposición le reprocha no haber escuchado a los productores. ¿Cómo toma esos dichos?
Eso es totalmente mentiroso. Si hay alguien que ha tenido contacto con los sectores más complicados de la Provincia ha sido la dirección provincial de Vialidad. Además de atenderla en lo personal, otro de los directores está en contacto permanente con los distintos sectores de la región, intentando minimizar el problema, tenemos inspectores en la zona. Hasta hace pocos meses, quien ahora me critica, me mandaba mensajes de whatsapp destacando la presencia que teníamos en la zona y las obras que estábamos haciendo. Pero ahora se dio vuelta. No termino de entender el porqué.
-En concreto. ¿Qué han hecho para paliar la situación en el sur provincial?
Tenemos un plan de trabajo en la emergencia que está ligado al anegamiento que Córdoba sufre en el este y en el sureste. Nosotros vemos el origen del problema, que es agua que no sólo se acumula en superficie, sino que está en napas a pocos centímetros de la superficie. Entonces esto provoca que la lluvia, por poca que sea, aflora sobre superficie. A pesar de las dificultades que implica hacer caminos sobre verdaderos lagos, los hicimos. Hemos llevado más de 2 mil metros cúbicos de piedra. Junto con recursos hídricos se han hecho canales hasta el borde de la provincia pero allí aparece otro problema que son las obras en Buenos Aires.
-Hacen falta canales del otro lado de la provincia
Hasta que la provincia de Buenos Aires no haga la obra del saneamiento del Salado, Córdoba no puede tomarse el agua, ni evaporarla. Esa obra va a permitir que las 4 millones de hectáreas que Buenos Aires tiene inundadas vayan hacia a el mar, a través de la cuenca del Salado. Ahí Córdoba podra sacar el agua. Nosotros le pedimos al gobierno nacional que ayude a Buenos Aires ya que es una obra gigantesca. Eso nos va a poder resolver el tema de los anegamientos porque vos llegas hasta el límite, pero los canales no trabajan. Es como tener una bañadera inclinada con un tapón. Hasta que no saquen ese tapón, al agua le va a ser imposible salir.