“Los dos grandes problemas económicos de las ultimas décadas han sido el alto déficit fiscal, que condujo a la inflación o al endeudamiento, y la falta de competitividad, que condujo al déficit externo y en varios periodos a vaciar de dólares al Banco Central. Por uno u otro o ambos motivos Argentina cayó en fuertes y repetidas crisis, y con cada crisis fue subiendo el desempleo y la pobreza”. El diagnóstico lo realiza Marcelo Capello, presidente del Instituto de Estudios Económicos sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral) de la Fundación Mediterránea.
La Mediterránea conmemora esta semana su aniversario 44° desde que fuera fundada por un grupo de empresarios cordobeses. En ese espacio, se encontraron entre otros, Fulvio Pagani, Néstor Scarafía, Lelio Lambertini y Piero Astori. Astori fue uno de los primeros impulsores de la entidad convocando a una treintena de empresas para “estudiar la economía argentina con óptica mediterránea, lo cual no significa acentuar los regionalismos sino unir al país tras un plan que facilite el armonioso desarrollo de todas sus regiones. De contar con un foro apartidista donde se discutan los grandes problemas económicos nacionales”, según sus propias palabras. Hoy la entidad es presidida por su hija, la empresaria María Pía Astori junto a Marcos Brito, del Banco Macro como vicepresidente.
En una propuesta por repasar los problemas que se siguen repitiendo a lo largo de las décadas y para debatir algunas líneas de acción, además del rol que le cabe al sector privado PERFIL CORDOBA dialogó con Capello y Astori.
El economista ratificó que para atender las falencias crónicas que tiene nuestro país se debe echar mano a las herramientas necesarias que se requieran para eliminar el déficit fiscal estructural y los problemas de competitividad, que también son estructurales como los impuestos, las regulaciones, y la falta infraestructura, a lo que suelen agregarse problemas de competitividad cambiaria.
“Argentina debe rediseñar su gasto público de largo plazo, para que sea financiable con una presión tributaria que no sea un lastre para la competitividad. Y debe tener una política de Estado para mejorar la competitividad y las exportaciones, agregando valor a la producción y generando empleo privado de calidad”, subrayó Capello.
Según su visión, el objetivo más urgente debe ser reducir el déficit fiscal bajando el peso del gasto público: “ello inicialmente dejará poco margen para bajar impuestos, por lo que primero se deberá privilegiar aliviar los impuestos de quienes compiten con el exterior”, marcó.
-¿Cómo se puede desmontar la brecha laboral que vemos entre el empleo en blanco y la creciente informalidad?
-Para generar nuevamente empleo en el sector privado, además de salir de la recesión para que exista mayor demanda de empleo, será fundamental generar reformas en las regulaciones laborales, muchas de las cuales vienen de la década del 70, y resultan obsoletas para la economía moderna, en que crece fuertemente el peso de las Tics y lo digital. Por supuesto, también será necesario mejorar las instituciones políticas y económicas, para reducir la desconfianza que predomina en la economía local desde hace mucho tiempo.
Un piso a “Berretalandia”
En el marco de su aniversario la Mediterránea convocó al economista Carlos Melconian para disertar, vía Zoom. Allí, entre muchos conceptos y un extenso análisis el exdirector del Banco Nación pidió que se atiendan los desequilibrios estructurales para frenar el deterioro crónico de las variables. “Los dos años que quedan en este escenario poco y nada va a cambiar. La mediocridad que defino como Berretalandia es total. Es muy importante que además de la elección venga el impedir el acostumbramiento de Berretalandia, recrear la idea de querer tener futuro, de los chicos, de la educación, de que la gente quiera quedarse. Es más que el ordenamiento económico, veo una desconfianza en la clase dirigente que entre todos debemos corregir. Berretalandia nos incluye a todos, es un proceso degenerativo. Es muy importante que la sociedad demande un piso a Berretalandia, en esta deslucimiento y agotamiento de lo estructural”, disparó.