Un informe audiovisual de la firma ID Consultora Inmobiliaria recogió el análisis de Damián Tabakman, rector de la Escuela de Negocios de Real Estate, para poner en perspectiva cómo ha sido el impacto de la crisis cambiaria y financiera del país en el sector. Juan Pablo Baca, director de ID, dialogó con Tabakman quien advirtió que la crisis repercutió fuertemente en el sector inmobiliario, hubo una gran retracción en las operaciones, mucha dificultad para cerrar compras y ventas y grandes problemas a la hora de llegar a la escritura de la mano de un préstamo hipotecario bancario. “Después de la devaluación, el movimiento en los precios hace que la gente no llegue a cerrar la operación que tenía pactada originalmente. Lo cierto es que ha sido un momento muy difícil para la macroeconomía en general y el sector inmobiliario estuvo lejos de haber sido ajeno a las turbulencias que hasta ahora hemos tenido”, dijo Tabakman.
El analista destacó la posición de entidades bancarias como el Banco Provincia de Buenos Aires, el Ciudad de Buenos Aires o el Supervielle, que plantearon la continuidad de las operatorias UVA´s, con niveles de tasas más altas, pero que, según él siguen siendo interesantes y también la continuidad de la operatoria de préstamos intermedios para el financiamiento de proyectos inmobiliarios. “Los bancos entienden esto como una turbulencia pasajera y mandaron señales en torno a la continuidad del financiamiento”, apuntó.
Expectativas en el mercado. En relación a los escenarios que se abren en el mediano plazo, Tabakman vaticinó que el mercado quedará sensible y que tendrá que reponerse del golpe recibido durante algunos meses: “Lo que ocurrió fue fuerte, no fue una cuestión menor y le ha dado un baño de realismo a buena parte del mercado y eso va a hacer que muchas de las variables que damos por sentadas vayan acomodándose. Veo un mercado que va a necesitar cierto plazo para adecuarse. Seguramente no será un plazo tan corto hasta que se reconstruya una percepción de confianza”.