En medio de una amplia agenda que destacó reuniones con Omar Perotti y Eduardo Duhalde y que incluiría el encuentro con un maestro mayor de obras, experto en tratamientos antigrieta, el gobernador Juan Schiaretti se hizo tiempo para abrir el miércoles las sesiones de la Legislatura mediante un discurso que fue catalogado como “ejemplar” por sus seguidores, en tanto que la oposición le aplicó calificativos más duros que los empleados por Shakira contra Gerard Piqué. Entre otras cosas, el mandatario cordobés anunció el hermanamiento del Camino de Brochero con el Camino de Santiago, lo que llevó a que los españoles abriguen la esperanza de que se construya un tercer carril en esa ruta de peregrinación de Galicia.
Personal de seguridad habría advertido ese día la presencia en el firmamento de un globo espía chino, que seguramente intentaba develar el secreto mejor guardado de Occidente: la fecha de las elecciones en Córdoba. Oculta bajo siete llaves (quizás ocho), esa decisión sigue siendo una incógnita, tal vez a la espera de que Luis Juez y Rodrigo de Loredo terminen peleándose y opten por resolver sus cuitas mediante el democrático procedimiento de ir por separado. Mientras en Juntos por el Cambio agotan las existencias de pastillas para calmar la ansiedad, en Hacemos por Córdoba potencian la figura de Martín Llaryora, para lo que estarían gestionando el ingreso del sanfrancisqueño en algún Hall de la Fama.
“Abro YouTube y me aparece Martín, entro a Instagram y está él, lo único que falta es que se asome por la tapia del vecino cuando estoy tendiendo la ropa”, se habría quejado un dirigente radical que hasta habría sugerido probar con el método de la hipnosis para que Schiaretti finalmente diga qué día será la votación. Hartos de esperar, desde Encuentro Vecinal habrían empezado a rezar novenas para que se sepa cuanto antes cuándo será el momento en que hablen las urnas, al tiempo que desde la izquierda cantan “paso, paso, paso, se viene el comiciazo” y desde el sector libertario preparan un casting de imitadores de Javier Milei para determinar quién será el aspirante a la gobernación bendecido por el referente nacional.
También subsiste el interrogante sobre el calendario electoral para la Municipalidad, donde hubo un lanzamiento extraoficial de Daniel Passerini como el garante de la continuidad de la gestión actual, algo debe haber puesto a Miguel Siciliano más nervioso que Kolo Muani frente al ‘Dibu’ Martínez. Y así como en Hacemos por Córdoba se disputan la sucesión de Martín Llaryora en el Palacio 6 de Julio, en algunos hogares se pelean por definir quién entre todos los miembros de la familia será el suertudo que podrá ir al centro en colectivo, porque con el aumento del boleto a ‘cachi chien’, el presupuesto no alcanza más que para un solo viaje de ida y vuelta por día.
Se dice que es tradición que estos incrementos se produzcan cuando la gente está concentrada en otra cosa y es probable que se haya considerado que el viernes iba a haber luna llena en Leo, un fenómeno al que la astrología le atribuye efectos como el favorecimiento de la diversión, de la circulación sanguínea y de la suba intempestiva del pasaje en el transporte urbano. También puede haberse determinado que muchos ciudadanos se hallaban distraídos con las peripecias del atrincheramiento de Ricardo Bustos Fierro en su despacho del Juzgado Federal 1, un acontecimiento tan insólito como el regreso de Rusherking a La Banda junto a la China Suárez para actuar en el Festival de la Salamanca.
Tras verificar que hay colas para entrar a los restaurantes, el Gobierno nacional habría advertido la necesidad de emitir billetes de dos mil pesos, ya que para trasladar las propinas los mozos se estarían viendo obligados a utilizar camiones de caudales. También se habría dado el caso de artistas callejeros que en vez de hacer espectáculos ‘a la gorra’ debían hacerlos ‘a la bolsa de consorcio’, de mendigos que pedían “veinte billetitos por el amor de dios” y de naranjitas que para guardar su recaudación tenían que contratar un servicio de contenedores. Ahora hay quienes reclaman que haya monedas de 100 pesos, para darles a los niños así compran caramelos y para que nos creamos que, a pesar de la inflación, el kilo de pan cuesta apenas ‘unas chirolas’.
