Justificar los Pogrom terroristas de Hamas, quienes se esconden en túneles subterráneos junto a rehenes de toda edad, sin importar clase ni religión, haber asesinado mil trescientas personas civiles sin posibilidad de defensa alguna, haber secuestrado más de trescientos civiles víctimas de su insaciable fanatismo criminal, deja al trasluz que el presidente de Brasil está de acuerdo y justifica el accionar de estos salvajes.
Como miembro de una sociedad organizada y democrática, tengo el deber de repudiar con toda la fuerza, desde mi lugar de ciudadano argentino todas y cada una de las nefastas expresiones de este señor con título de presidente, haciendo gala de su nefasta provocación, ignorancia, vehemente antisemitismo, provocador insensato sin justificativo alguno, del repudio masivo del mundo civilizado.
Todos nosotros tenemos que tomar debida nota por profundizar esta herida y burlarse del duelo irreparable, por pérdida de vidas humanas, a manos del terrorismo internacional de Hamas y Hezbollah. No podemos dejar pasar alegremente estos espasmos verbales de Lula, quien retrocede en lo humano, en lo espiritual, y primordialmente en lo ético, que debe tener en cuenta cualquiera que se precie dirigente y ser humano.
Brasil retiró a su embajador de Israel
Justificar la barbarie y el terror criminal, es ser parte de ello. Y, ni Brasil y mucho menos el mundo civilizado, necesita de voces concordantes con los criminales de cualquier signo, raza o religión.
Lo nefasto de esto es que de estas notorias aseveraciones cómplices con lo criminal no se vuelve. Presidente de Brasil Lula da Silva, usted acaba de rifar su credibilidad e imagen a manos del terrorismo internacional. Me parece, que su pálida figura, es consecuente con su humillante figura decadente por siempre. Los asesinos merecen la condena. Las víctimas y sus familiares merecen respeto. Y usted ha abusado de esa condición. Que Dios se apiade de usted.
*Parlamentario del Parlasur por La Libertad Avanza.