Después de una pelea judicial, “que todavía no terminó”, el CEO de OCA está convencido de que el principal correo privado de Argentina “va a recuperar el rumbo y vamos a poder aplicar el plan de negocios que tenemos pensado desde hace tiempo”.
Patricio Farcuh aceptó el diálogo con PERFIL Córdoba tras su presentación en la Semana TIC, donde disertó sobre “Círculo Vicioso entre Redes, Buscadores y Big Data”. Antes de la primera pregunta, Farcuh empieza a relatar “la odisea” que vivió: “Desde septiembre de 2016 durante 10 meses, el período en el que me usurparon la empresa. La vaciaron, falsificaron firmas, la endeudaron hasta la maceta (sic). No sé quién se quiso quedar con la empresa ni para qué, pero lo real es que hay un vaciamiento de $ 1.000 millones y por eso contratamos a una consultora que lo va a demostrar”.
Farcuh recuerda el día en el que Moyano y un grupo de trabajadores ligados al gremio de Camioneros irrumpieron en la sede de la empresa y lo echaron “en presencia de Gendarmería, que en teoría estaba ahí para cuidarme, y de las cámaras de TV. Una locura”. El empresario remarca que en ese momento se produjo el “descalabro” de OCA.
–¿Qué pasó en esos 10 meses?
–Me desarmaron camionetas, me vendieron aviones, me robaron $ 5 mil millones: pasaron por mi escritorio… y yo no los vi. No están.
–¿Cómo empezó el proceso de recuperación de la empresa?
–Teníamos todo en contra: el gobierno, la Afip, los fiscales, los medios… El concurso nos obliga a escalonar unos $ 2.100 millones de pasivos. Es una cifra que se puede levantar porque OCA factura unos $7 mil millones anuales, inclusive hacia finales de este año.
Tras recuperar el control de la firma en mayo de 2017 y el llamado a un nuevo concurso de acreedores, hoy la situación parece acomodarse tras la aprobación de la Afip para un plan de pagos y un fallo de segunda instancia, que autoriza a operar a las tres empresas del grupo: Organización Coordinadora Argentina S.R.L. (OCA), Oca Postal S.A. y Oca Logística S.A.
En ese esquema, hay un plan de achicamiento de personal en marcha con el que se busca achicar las pérdidas mensuales, que llegan a los $ 100 millones. Con 6.600 empleados en la actualidad, la pelea con Moyano parece haber quedado atrás (o al menos en stand by). “El sindicalista más importante de la Argentina era el presidente de la empresa… una película de Fellini…”, dice.
La gran Alibabá. En ese contexto de disputas judiciales, Farcuh tiene diagramado un plan para recuperar a la empresa. “En el corto plazo vamos a firmar un acuerdo con una firma extranjera del sector bancario (de origen chino), a través del cual vamos a desarrollar una unidad de comercio electrónico propio apostando por el retail y el servicio postal, siguiendo una línea del negocio similar a la de Alibaba, ofreciendo productos premium en categorías como fútbol, automovilismo (tienen la licencia de la marca Fangio en Argentina) y música”, a través de compras on line con entrega garantizada en 48 horas.
–Algunos dicen que es difícil que usted pueda revertir la situación de OCA.
–No veo el negocio desde el punto de vista de Héctor Colella (NdE: se hizo cargo de la empresa por mandato de Yabrán, tras su muerte). Dicho sea de paso, si lo veo a Colella lo cago a trompadas…
