PLAYAS CARIBEÑAS, CAFÉ Y CULTURA

Una imponente naturaleza con su biodiversidad, reconocida como una de las más exhuberantes del mundo, junto a su legado histórico cultural y la belleza de sus playas e islas caribeñas, hacen de Colombia el destino elegido por muchos turistas que buscan tener estancias más largas, encontrar destinos sostenibles y dejar un impacto positivo.

La nueva estrategia promocional de ProColombia, el ente encargado de ese fomento, es ofrecer esa propuesta en seis regiones turísticas: el Gran Caribe; el Pacífico; los Andes Occidentales; los Andes Orientales; el Macizo Colombiano, y la Amazonía-Orinoquía.

Pero no son lo mismo las expectativas de un turista europeo o norteamericano que las de un argentino. Para quienes la visiten, particularmente los mediterráneos cordobeses, las regiones que pueden ofrecer las mejores propuestas son:

 

Gran Caribe Colombiano.

El Parque Nacional Tayrona, donde la selva desciende hasta el mar; las nieves perpetuas de la Sierra Nevada de Santa Marta; las dunas del desierto de la Guajira, y el maravilloso mar de los siete colores que baña la isla de San Andrés, conforman esta región.

Pero hay más que arena dorada, arrecifes de coral y mar Caribe. Es el hogar de culturas fascinantes, como las indígenas Wayú, Kogi y Zenú o las raizales (comunidades con raíces africanas, europeas y caribeñas) y las palenqueras (mujeres que pasean por el Caribe Colombiano, con sus enormes sonrisas, vestidas con los colores del arco iris y una canasta de frutas en sus cabezas).

También sitios arqueológicos y sagrados, como Ciudad Perdida, y del imaginario ‘macondiano’ de Gabriel García Márquez. Y la cuna de una de las ciudades coloniales mejor conservadas del mundo, Cartagena de Indias, Patrimonio de la Humanidad, auténtica joya colonial, y otros Pueblos Patrimonio, como Mompox y Lorica.

 

Montañas de café y flores.

Los Andes Occidentales Colombianos, es la región donde se ubica la moderna ciudad de Medellín, un destino que bien vale la pena visitar y conocer, hablar con su gente, viajar en su sistema de transporte, como el Metrocable; conocer la historia ya superada de Pablo Escobar; admirar las obras de Botero, y ‘puebliar’, palabra que se usa para describir la visita de los enclaves de la Red de Pueblos Patrimonio.

En Medellín es apropiado contratar un guía de turismo, quien seguramente le contará el cómo y porqué de la maravillosa transformación urbana de la ciudad; le hablará de Carlos Gardel y su impronta en el lugar, y le recomendará qué parques visitar. Es el mejor consejo.

Luego podrá disfrutar de majestuosas montañas con aroma a café, coloridos pueblos, ríos de aguas cristalinas, aves exóticas y valles con cultivos de flores y conocer a las ‘silleteras’ (o silleteros), mujeres que llevan sobre sus espaldas una silla cargada con flores de colores y formas inimaginables. En agosto se realiza la Feria de las Flores con el desfile de las silleteras, una fiesta popular y tradicional recomendable que cuenta con su propia canción, una de cuyas estrofas dice “… cuando pasa un silletero, ¡es Antioquía la que pasa!”.  Es la tierra del Paisaje Cultural Cafetero, Patrimonio de la Humanidad, y su cultura ‘paisa’.

 

Andes Orientales.

Si hay una región que condensa perfectamente el atractivo equilibrio de Colombia entre tradición y modernidad, es la de los Andes Orientales Colombianos, que se extiende hacia el norte desde la capital, Bogotá, con sus rascacielos, museos, gastronomía y rica oferta cultural.

Esta región refleja otro mundo, el de una época de leyendas, de reinos perdidos y pequeños pueblos coloniales, muchos de los cuales, como Villa de Leyva y Barichara, conservan el encanto de las viejas costumbres sin que lo cercano contemporáneo les afecte.

Allí arrancó la colonización, pero también fue la ruta libertadora donde se enfrentaron y cruzaron las culturas ancestrales de los habitantes originarios con la europea y la criolla, mezcla que generó un rico imaginario e impulsó leyendas como la de ‘El Dorado’. El relato del guía nos aclara: “La afiebrada imaginación de los conquistadores les hizo ver en sus delirios, un pueblo brillante con calles y casas de oro, en donde el preciado metal era tan abundante y común que prácticamente todo se construía con oro, incluso los utensilios de cocina”.

Además, los Andes Orientales albergan parques naturales impresionantes, como El Cocuy, la mayor masa glaciar de Colombia con más de 25 picos cubiertos de hielo y 150 lagunas, o el Cañón del Chicamocha, para deportes de aventura. Para los amantes de la naturaleza, el Parque Natural Chicaque, a sólo 30 minutos de Bogotá, o el Chingaza, un tesoro natural que guarda secretos e historias de los pueblos indígenas Muiscas y Guayupes. La ubicación central de los Andes Orientales Colombianos permite dimersionar la cordillera, desde los llanos o desde el Valle del Magdalena, y es un paraíso para los amantes del ciclismo.

Un viaje para gozar y disfrutar de playas y mar Caribe, pero también para conocer el legado compuesto por una fuerte mezcla entre lo ancestral, lo indígena, lo afrodescendiente, lo criollo y lo contemporáneo, que se traducen en la música, la moda y una exquisita gastronomía. Si a todo esto se suma la calidez de su gente, Colombia es un destino recomendable.

 

Nuevos requisitos de ingreso

El Gobierno colombiano dispuso recientemente los siguientes requisitos para el ingreso de extranjeros no residentes:

• Si no tiene esquema completo o no han pasado 14 días desde la aplicación de la primera dosis, debe presentar PCR negativo con vigencia de 72 horas previas.
• Si no tiene puesta ninguna dosis, no podrá ingresar al país.