Provincia pediría a la Nación que garantice piso mínimo de coparticipación por la crisis

Con el inicio del mes de abril, y más del 70% de los sectores económicos trabajando en su mínima expresión por la pandemia, las autoridades estatales se preparan para un desplome en los números de la recaudación que será rotundo. Los funcionarios de Ingresos Públicos de provincias y municipios no se animan a aventurar la magnitud de la caída, pero todos saben que será de dimensiones significativas. “Hoy estamos viendo el día a día. No tenemos ninguna proyección. A medida que avancen los días lo veremos, pero va a ser importante”, reconoció un funcionario. El escenario es tan frágil que en los últimos días se volvió a escuchar la versión, propiciada por intendentes del interior (pero también dentro del PJ), de la necesidad de emitir cuasimonedas para garantizar el funcionamiento de las administraciones subsoberanas. Antes que llegar a medidas tan extremas, desde la Provincia reconocieron que junto a otras administraciones provinciales dialogan con la Nación para arribar a medidas coordinadas en términos de tratar de sostener los ingresos públicos.

Una red. Según confiaron fuentes de la Provincia a PERFIL CORDOBA, las administraciones provinciales, incluida la de Juan Schiaretti, impulsan una negociación concreta con la Nación. La idea es alcanzar un compromiso entre Nación y provincias para que se fije un piso de coparticipación garantizada de manera que los estados provinciales y municipales puedan hacerse con recursos vía reparto de ingresos tributarios en un volumen mínimo de cara a lo que se viene, esto es dos o tres meses en los que la recaudación de la mayoría de los impuestos estará por el piso. La caída de la actividad golpea de lleno a provincias e intendencias porque se desploman las alícuotas de Ingresos Brutos e Industria y Comercio. Además de que se prevé que la gente dejará para más adelante el pago de impuestos que gravan inmuebles y automóviles.

De hecho, salvo Bienes Personales y los Derechos de Exportación, el resto de los impuestos principales mostraron números en rojo en marzo. Atentos a que los derechos de exportac ión no se coparticipan y son los que está ‘zafando’ de la malaria es que se buscará contar con este mínimo de ingresos aportados por Nación. “Es un instrumento que ya se usó en 2001, es un piso, una red que buscamos tener porque la caída de la recaudación va a ser muy grave. Se está hablando para ver si se puede lograr eso”, dicen desde la Provincia.

Marzo afectado. Esta semana se difundieron los datos de recaudación del mes de marzo, considerada la foto previa al impacto total de la crisis generada por la cuarentena de la pandemia. El Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf) señala que, continuando la caída real de la recaudación del primer bimestre, marzo vuelve a mostrar el mismo comportamiento, con una caída del 8% interanual, la mayor en lo que va del año. Implica que el primer trimestre de 2020 computa una caída real de 6%, inferior a la del primer tr imestre de 2019 (- 8,4%) pero aun así entre las más bajas de los últimos 10 años. “A la hora de explicar la caída real se destacan las caídas de los impuestos internos y del IVA neto, por la magnitud de sus bajas, y teniendo en cuenta que son los principales impuestos ligados al consumo y la actividad. Con la inflación considerada (2,4% para ese mes), las caídas en tales impuestos son del 15,9% y 13,7%, respectivamente. La recaudación del impuesto PAIS se ubicó en el orden de los $6.400 millones, redondeando un promedio mensual de algo menos de $6.000 millones en el primer trimestre. Por su parte, Seguridad Social mostró en marzo, al igual que el mes anterior, una caída real en un escalón inferior que el nivel total de recaudación (-4,8%)”, dice un reporte de esa entidad.

21 meses de caída. Según los datos que esta semana publicó el Ministerio de Finanzas de la Provincia, en marzo la recaudación fue de $20.122 millones, lo que implica un crecimiento nominal del 27% respecto al mismo mes del año 2019. En ese sentido se consignó que, si se descuenta la inflación, considerando a tal fin el Índice de Precios al Consumidor de la Provincia de Córdoba hasta febrero de 2020 y una estimación para el mes de marzo, la recaudación experimentó una caída interanual del 13,8% en términos reales (-$3.224 millones), la mayor de los últimos 12 meses.

Para la cartera de Finanzas provincial la caída en marzo se debe, en parte, a la persistente crisis nacional que comenzó en abril del año 2018 y se magnificó por el impacto de los primeros días de aislamiento obligatorio. “Esta medida, en conjunto con la crisis económica que la pandemia del coronavirus ha generado a nivel mundial, produjo una caída en los ingresos fiscales del 13% respecto a las proyecciones propias realizadas con anterioridad al shock que la cuarentena y la pandemia generaron. Por consiguiente, en un escenario sin COVID-19 la recaudación hubiese caído solo 0,6% real respecto de marzo 2019 y 15,1% respecto de marzo 2018”, señala la cartera que conduce Osvaldo Giordano.

En el fondo. Ese mismo análisis hacen desde el Iaraf al indicar que “parte de la menor recaudación observada en marzo, principalmente la de IVA, se vio afectada por la falta de liquidez derivada del aislamiento obligatorio que se ha hecho para prevenir la propagación del contagio”. Desde el instituto interpretan: “A nuestro criterio parte de lo no recaudado obedece a un aumento de deuda por parte de contribuyentes. Lo importante de cara a abril es que va a caer el devengado de los impuestos sobre la actividad porque van a incidir las menores ventas de marzo (en abril se paga saldo IVA de marzo) y a esto se le va a sumar el no pago (aún del menor devengado) por falta de liquidez de los contribuyentes. Habrá que estar atento a cómo evoluciona la recaudación durante el mes de abril”. Un dato final y preocupante se incluye en el reporte de recaudación del Ministerio de Finanzas local y señala que el impacto de la pandemia en los ingresos se sentirá durante todo el 2020 a tal punto que ubicaría la situación del bienio 2019-2020 en un nivel que podría incluso superar la caída registrada en 2002.