Tras fijarse la fecha del 3 de agosto para las internas en la UCR de Córdoba, comunicada por su presidente, Marcos Ferrer, la Junta Electoral (JEP) define el cronograma de los comicios para elegir candidatos a diputados nacionales del radicalismo con tonada, de cara a las Legislativas del 26 de octubre. La fecha surgió con forcé por el ultimátum de la justicia federal, a raíz de la judicialización de la interna de Ramón Mestre y sus aliados alfonsinistas.
Como lo adelantó Perfil Córdoba en la edición impresa del domingo, la Junta Electoral del centenario partido mantuvo una reunión anoche para escuchar a los apoderados de los distintos núcleos internos. El cronograma electoral, que los “radicales sin peluca” esperan -convencidos de que habrá internas-, es inminente.
Si no hay otro contratiempo, la JEP define hoy el cronograma electoral para su oficialización. Sin esta herramienta vital para la organicidad del proceso electoral, la convocatoria del #3A a los comicios internos -demandada por el alineamiento opositor de Más Radicalismo (encabezado por Ramón Mestre) es letra muerta.
Los apoderados pidieron 24 horas (el plazo vence alrededor de las 21 horas de hoy) para consensuar una fecha de presentación de listas de candidatos. Según confió una fuente, lo más probable “es que consensuen una fecha intermedia entre dos propuestas que hay” sobre la mesa. De este modo, se estima que la fecha será el 5 de julio.
En el mestrismo se muestran confiados en que habrá comicios internos. La fecha del #3A es a cuatro días de que venza el plazo fatal de la presentación de alianzas, según se desprenden del cronograma electoral nacional que está en marcha. Con estos tiempos ajustados, boinas blancas del palo opositor le atribuyen al deloredismo otra “acción dilatoria”.
En el núcleo de poder del radicalismo cordobés, referenciado en Rodrigo de Loredo, advierten que “el diablo -por el PJ- meterá la cola” al ser una interna abierta. Se espera una nueva movida con vientos fuertes del interior provincial que llegarán a la capital -en un mensaje destinado a Mestre- para desactivar las internas. Radicales con responsabilidad de gestión y con manejo de territorio insisten en afirmar que la dirigencia del interior “no quiere saber nada con las elecciones internas”.
En el mar de fondo de la rosca radical, siguen los cruces internos por la política de alianzas de la UCR de Córdoba por el “factor Milei” ante los comicios de medio término, donde De Loredo debe renovar su banca, pero hay mucho más en juego. “No hay 2027, sin 2025”, se le escuchó decir hace un tiempo al poder deloredista.
Escudería para competir
El diputado nacional con tonada busca encabezar una boleta competitiva para el 26 de octubre, pero la parada previa (7 de agosto) es definir una alianza electoral con socios locales. Mestre y sus aliados rechazan de plano la confluencia con La Liberta Avanza (LLA) de los Milei.
Para salir airoso de la contienda y quedar bien parado para el 2027, De Loredo debe armar una escudería competitiva. El referente radical tiene al PJ en frente, pero disputa con Luis Juez, un socio-rival en la interna cambiemista de muy buen trato con Milei, quien busca su bendición para la candidatura a gobernador.
Según se escucha desde Buenos Aires, el poder que habita la Casa Rosada le cerró la puerta a De Loredo en su idea de armar un gran frente entre LLA y la UCR en Córdoba, mientras una de sus espadas -la legisladora Alejandra Ferrero- planteó una estrategia de alianzas con los libertarios y otros socios para las elecciones de 2025 y proyectó hacia 2027 una alternativa competitiva en Córdoba liderada por el radical.
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"Yo creo que tenemos que escuchar a quienes comparten esta sintonía (en alusión a las demandas de austeridad estatal y combate a la corrupción), entre ellos La Libertad Avanza, por supuesto, con el PRO, con quien ya fuimos parte de un gobierno", opinó la deloredista en declaraciones al programa FORUM.
“La UCR Córdoba tiene que sumarse con quienes podemos ser competitivos, entre ellos La Libertad Avanza. Que la lidere Rodrigo de Loredo y acompañe Luis Juez con el Frente Cívico", completó.
Rechazo alfonsinista
Quien le salió al cruce a Ferrero fue Martín Lucas (Identidad Radical-becerrismo). El opositor interno le cuestionó a la deloredista arrojarse “una representación que no tiene” en la definición de una alianza electoral de la UCR con el partido de los Milei para las Legislativas 2025.
El alfonsinista calificó como un “nuevo embate” del deloredismo a los dichos de Ferrero y le pidió que “sean respetuosos de las y los radicales que piensan diametralmente lo contrario, y que sean respetuosos de la democracia interna”.
De esta manera, Lucas se refirió a los comicios internos convocados para el 3 de agosto próximo. Esa “será el momento en que afiliados y simpatizantes independientes del radicalismo se manifiesten al respecto”, retrucó.
“Las opciones son muy claras, hay quienes como Ferrero están dispuestos a entregar al partido a la ‘ultraderecha’ gobernante, y quienes estamos dispuestos hacer todos los esfuerzos que sean necesarios para sostener al radicalismo como un partido democrático, popular y tolerante, que por su filosofía están en las antípodas de Milei, sus políticas y la crueldad que representa”, enfatizó el precandidato a diputado nacional por Identidad y Conducta Radical.
