Así como sucedió con los desarrollos inmobiliarios en Villa Belgrano, vecinos de barrio Parque Chacabuco, Altos de Villa Cabrera y Altos de San Martín vienen luchando contra un próximo proyecto inmobiliario que estará en las inmediaciones del actual parque de estacionamiento inferior del Córdoba Shopping.
Se trata del proyecto DUO, dos torres de 15 pisos con 186 viviendas departamentales, un complejo de oficinas y una futura promesa de ampliación del centro comercial.
“Cuando esto se supo, ya hace 3 años, se convocó a los vecinos y se presentaron notas con más de 880 firmas. Debido a la gran envergadura que va a tener esto, nunca vimos presentado un estudio de impacto ambiental”, destacan los vecinos de la zona que le pidieron preservar sus nombres a PERFIL CÓRDOBA.
Este proyecto será realizado por la constructora del Grupo Proaco, junto con el estudio de arquitectura Zap. A modo de revalorizar el barrio, al combinar una oferta residencial, comercial y de oficinas.
Se asoma DUO, el complejo de torres en el predio del Córdoba Shopping
Pero, los vecinos explican que ni los servicios ni la infraestructura vial de la zona están preparadas para sostener el proyecto que se propone realizar.
“Actualmente, Villa Cabrera es uno de los barrios más afectados por el tema de las cloacas. Ya lo tiene hoy y es un problema severo. Cuando llueve, además, se inunda todo", describe uno de los habitantes. Consideran, si este problema es el actual, sus preocupaciones serán intensificadas cuando lleguen las casi 200 familias al sector. "Si esto es ahora imaginate lo que puede ser cuando lleguen estas torres” y agregan, “supuestamente hay una promesa de hacer nuevas cloacas en paralelo a la construcción del edificio. Ocurre que nunca se hacen a tiempo", sentencian los actuales propietarios que colindan con el Shopping.
Otro tema que no es menor, es la problemática relacionada al estacionamiento en la zona. La estimación futura de vehículos podría verse acrecentada cuando se instalen estos nuevos edificios.
“Ese estacionamiento que hoy es gratuito (pertenece al Shopping), con el proyecto, pasa a ser estacionamiento cubierto y los estacionamientos cubiertos, son pagos. Y la gente, no está dispuesta muchas veces a pagarlos, entonces terminan estacionando en el resto de las calles”, explican los vecinos autoconvocados de la zona que imaginan un faltante de espacios que alterará su actual cotidianidad.
Esto se suma al hecho que, hoy por hoy, las calles ya están sobresaturadas por el número de autos que transitan, según los vecinos. El intenso uso se refleja en mal estado de las arterias. Sumado a la aparición de los naranjitas en las inmediaciones del centro comercial, “que tratan de ganarse la vida, pero también son relojeadores de movimiento en la zona”, alertan quienes dejan sus autos frente a sus viviendas.
El convenio urbanístico
Estas torres son tan solo una pequeña parte, de un todo, que compone un convenio urbanístico de la empresa inmobiliaria, IRSA, propietaria de las tierras y del Shopping de Villa Cabrebra.
El plan inicial comprende mas de 60 mil metros cuadrados de superficie. Una parte, que comprende una parcela, es cedida a Proaco a fin de construir el proyecto. Aun faltan precisiones estas construcciones serán el final de todas las obras proyectadas.
“Proaco hoy está plantado en un punto en el que dicen ‘no, nosotros por ahora vamos a construir una torre’, pero inevitablemente van a seguir por la segunda torre y por las oficinas", describe uno de los vecinos. "El impacto de una sola torre no es significativo, pero, sin embargo, es la punta de lanza para terminar haciendo un todo”, suponen los actuales moradores.
Sin información
Por otro lado, son numerosas las oportunidades que los vecinos se han acercado a la municipalidad para consultar los permisos y los informes de impacto ambiental. Sin embargo, estos "nunca aparecen".
“Hemos solicitado en cientos de oportunidades mayor información sobre el proyecto a la municipalidad y la municipalidad no lo entrega. A veces nos basamos en supuestos, porque no hay información. En lugar de tener una postura mucho más abierta en el sentido de informar a los vecinos o como se prevén soluciones que se podrían encontrar a los problemas, hay un ocultamiento total”, declaran.
En términos generales, los vecinos del barrio no se oponen a las medidas de desarrollo urbanístico, “entendemos que hay una necesidad de progreso, pero definitivamente es un proyecto desmedido para el barrio. Porque se podrían construir otro tipo de cosas, más acordes al sector, con las posibilidades concretas que tiene el vecindario”, concluyen.