El último gran escritor de la generación de Cortázar, Borges y Bioy Casares pasó hoy a la historia, y en diferentes lugares del mundo se lo recuerda.
Uno de esos lugares es España, país que le brindó siempre enorme admiración y respeto. Precisamente, una de las últimas ocasiones grandiosas a las que pudo acudir fue al III Congreso de la Lengua de Rosario (2004), donde se le rindió un homenaje con ovaciones interminables. Sabato lloró y no pudo pronunciar palabra ante dos ilustres invitados: el rey Juan Carlos y la reina Sofía de España, que presidieron el homenaje.
La prensa española presenta hoy su muerte como noticia destacada, dedicándole palabras de gran reconocimiento. "Fue un gran luchador contra la dictadura", dice El País. El diario El Mundo, en tanto, lo registra como “un hombre destacado por su firme compromiso ético”, y uno de los españoles que llegó a reconocerle en persona su compromiso con las libertades fue el príncipe Felipe, hijo de los reyes españoles.
Apenas unas pocas fotografías ilustran el encuentro que príncipe y escritor mantuvieron, no se sabe de qué hablaron y en realidad poco y nada se sabe sobre la relación que tuvieron, pero el hecho de que Felipe de Borbón hubiera visitado personalmente, en su casa, al ahora fallecido escritor, es un síntoma de la cercanía que existió entre ambos en los últimos años.
El príncipe, muy interesado por el mundo de la cultura, del arte, la ciencia, la literatura y encargado de conceder todos los años los prestigiosos «Premios Príncipe de Asturias», visitó al escritor en su casa de Santos Lugares -partido de San Martín- cuando en mayo de 2003 viajó a la Argentina para participar de la jura del presidente Kirchner.
A la salida, Felipe afirmó a la prensa ser “un gran admirador” de la obra de Sabato, autor de Sobre héroes y tumbas y El túnel, entre otras obras, y un año más tarde, el escritor fue invitado al casamiento en Madrid de Felipe con Letizia Ortiz.
La lista de invitados debía incluir, a pedido del príncipe, a escritores, artistas, pensadores y políticos dedicados al fomento de la libertad, la democracia y la paz tanto de Latinoamérica como en el resto del mundo. Así, Ernesto Sabato tomó asiento con personajes de la talla de Nelson Mandela.
Ese mismo año, Felipe de Borbón inauguró la “Biblioteca Ernesto Sabato”, un homenaje del prestigioso Instituto Cervantes con sede en Budapest, ofreciendo un discurso muy elogioso sobre el escritor en presencia de su compañera de los últimos años, Elvira González.
La cercanía del heredero del trono español hacia el fallecido escritor argentino sobrepasa también el afecto y la admiración mutua, ya que desde hace décadas la Familia Real española mantiene fuertes vínculos con personalidades latinoamericanas con influencia en el sistema democrático de la región.
Galardonado en España con el Premio Cervantes en 1984, Sabato llegó a ser propuesto por la “Sociedad española de Autores y Editores” candidato al Premio Nobel de Literatura de 2007. Hoy en España -donde Sabato publicó aplaudidos editoriales en contra del terrorismo de ETA- se valora y se recuerda, entre otras cosas, su labor excepcional en la confección del informe “Nunca Más”, pieza fundamental en el esclarecimiento de las atrocidades cometidas por el poder en la última dictadura argentina.
(*) Especial para Perfil.com
Twitter: @DariusBaires