Este jueves 5 de octubre se inaugura la muestra “El color del tiempo” que incluye más de cien obras de los 36 años de trayectoria de Paula Rivero. La cita es en el barrio porteño del Abasto en el centro Cultura Viva (Dr. Tomás Manuel de Anchorena 666).
La exposición fue curada por Federico Platener y se incluye desde pintura hasta escultura, pasando por dibujo, acuarela, cerámica, el objeto, arte digital y textil. “En el arte hay que permanecer e innovarse”, señaló la artista en diálogo con PERFIL.
Paula Rivero siempre se vinculó al arte como casi cualquier niño, pero fue central para darse cuenta de que ese sería su destino una docente muy peculiar. Cuando Paula tenía 14 años, vivía en Uruguay -vivió en varios países siguiendo los destinos de su padre que trabajaba para Olivetti- y allí su profesora de arte de la escuela secundaria les decía que se quedaran dibujando mientras ella dormía. Más allá de que pueda resultar cuestionable como rol pedagógico, la realidad es que para la futura artista contar con esa libertad para crear le hizo descubrir que a eso se quería dedicar.
“Era mi momento cuando se dormía la profesora para ir al armario donde estaban todas las pinturas, todos los materiales y pintar todo lo que podía antes de que se despierte. Entonces fue como una etapa mía de mucha experimentación donde no estaba guiada por nadie, sino que simplemente tenía la libertad de investigar y sin límite de materiales”, recordó Rivero.
La muestra, explicó su curador Platener, “nos guía a través de un mismo hilo conductor, con conceptos que se repiten y otros que a lo largo de su producción van evolucionando, elementos que se vuelven icónicos en su obra y que a la par van construyendo su discurso, materializando el alma detrás del objeto físico”.
Los cuadros incluyen sus primeros ejercicios plásticos en la serie "Génesis" (1987-1998), pasando por su serie abstracta “Escrituras” (1998-2018), la experimentación del soporte de la obra en “Trapitos al sol” (2009-2018), la exploración del universo femenino en “Armaduras y Corsets” (2011-2018), la poesía visual de “Alados” (2014-2018), para llegar a “Origami”, su momento actual.
“En mi última serie, que me llevó los últimos tres años, ‘Origami’ que son los papeles que van construyendo figuras, es un resumen de todo mi trayecto cuando la primera serie de hace 36 años se llamó ‘Génesis’ entonces siento que puede resumir en estos últimos años todo todas estas series y conceptos a los que fui llegando con mi arte con la experimentación y con la búsqueda”, detalló Rivero.
Paula Rivero nació en Buenos Aires en 1973. Desde su infancia y hasta su juventud, residió en diferentes países (Argentina, México, Italia, Perú y Uruguay). Tras sus estudios de Diseño Gráfico en la Universidad Iberoamericana (México D.F.), regresó a la Argentina, donde ingresó a la Escuela Nacional de Bellas Artes Prilidiano Pueyrredón y se recibió de Profesora Nacional de Pintura.
Hace pocos días, presentó la muestra “Atemporal”, en el salón de los Pasos Perdidos, de la Facultad de Derecho de la UBA, una exposición de más de 140 obras de los artistas de su taller, que ocupó un lugar destacado en la Noche de los Museos, el gran evento cultural que realiza año a año la ciudad de Buenos Aires.
El centro cultural Cultura Viva es un flamante espacio dedicado al arte, ubicado en el circuito artístico y cultural del barrio del Abasto. Su misión es difundir cultura en todas sus disciplinas. El espacio cuenta con siete salas de exposiciones, donde conviven distintas disciplinas que interactúan y se potencian entre sí: actividades plásticas, arte, danza, literatura, teatro y cine.
cp
