Después de cuatro meses de estabilidad cambiaria, en la jornada del miércoles el dólar alcanzó su cotización más alta del año al llegar a $ 41,30 en horas del mediodía para finalmente cerrar en $ 40,60. La disparada puso en alerta al Banco Central, que mantenía la divisa estadounidense "planchada" desde octubre gracias a las bandas de flotación, la alta tasa de interés y la "aspiradora" de pesos que representa el límite a la base monetaria.
Ante esta situación, la entidad que conduce Guido Sandleris intervino en el mercado de futuros y volvió a subir algunos puntos la tasa de interés para moderar la suba. Pero la escalada llamó la atención del público en un contexto de rebrote inflacionario, dado que los precios siguieron subiendo en los últimos meses a pesar de la paz cambiaria. Esa fue una de las razones, junto al crecimiento de la deuda externa, que los especialistas mencionaron a PERFIL para explicar la disparada de esta semana.
- INFLACIÓN
"Los datos de inflación fueron mucho más altos de lo que esperaba el mercado para enero, y fue un mes en donde no hubo impacto por aumento tarifario", consideró Nicolás Litvinoff, economista y director de Estudinero.net.
Para el economista, uno de los factores que impulsó el despegue fue la reacción de los inversionistas ante el alza del 2,9% que arrojó el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del primer mes del año y la proyección de una cifra mayor para febrero. "Por algunos períodos de tiempo dan crédito al discurso de que va a bajar, pero cuando aparecen los datos puros y duros se vuelven a refugiar en el dólar".
En este mismo sentido opina Martín Kalos, director de la consultora EPyCA, quien asegura que "la situación no es alarmante", sino que se trata de un "reacomodamiento de precios". "Hay que entenderlo en un proceso de largo plazo. Si bien es cierto que para estos días es una suba rápida, no es alarmante. Hasta hace poco estuvo planchado, mientras el resto de los precios siguió subiendo, por eso es lógico que también suba", describió.
De todas formas, sostuvo que "es un foco de alerta" que estará supeditado a la velocidad en la que el dólar se aprecie. "Lo importante es que no se convierta en una corrida. No debería pasar, pero con un BCRA atado de pies y manos, no hay tantas herramientas para evitarla hasta que el precio no llegue al techo de la zona de no intervención" que hoy está en $49,69.
- TASA DE INTERÉS
Si bien este miércoles el Central volvió a subir la tasa de Leliq que fijó en 46,01% contra el 44,48% del martes, los economistas coinciden en que la baja paulatina que viene experimentando desde el año pasado es otra de las causas que empuja la divisa hacia arriba.
Para Litvinoff la situación es similar a la que ocurrió cuando el expresidente del Banco Central Federico Sturzenegger bajó la tasa de Lebac. "En un principio los agentes económicos confiaron en las metas de inflación, pero cuando los indicadores mostraron el alza, salieron a cubrirse con dólares", indicó.
"La tasa de interés es la principal herramienta que tiene el Central para la contención del dólar. Si se bajan las tasas en un contexto de suba de precios, se arma una combinación que obliga al dólar a reacomodarse", opinó al respecto Kalos.
- INCERTIDUMBRE POR LA DEUDA
De acuerdo a los especialistas, la capacidad de Argentina para enfrentar sus deudas en 2020 será una variable de importancia para la economía, sobre todo a partir del segundo semestre del año. En la mirada de Litvinoff, en este momento el país "tiene una situación financiera insolvente". "Tenemos más de 170 mil millones de dólares de deuda, mientras que las reservas disponibles no llegan a los 35 mil millones", opinó.
"Esa debilidad hace que cuando el contexto local tiene más incertidumbre -como tenemos ahora por las elecciones- este tipo de movimientos bruscos en el dólar sean esperables y totalmente normales", concluyó.
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