El clima de tensión entre los bancos y el Gobierno no se traduce en los balances del conjunto de las entidades, que en los últimos tiempos fueron uno de los sectores de la economía que mejores resultados obtuvieron.
De acuerdo con datos del Banco Central correspondientes a enero pasado, el patrimonio neto del sistema financiero consolidado mostró un incremento interanual de 30,9%, impulsado por ganancias contables.
Los beneficios del sector en relación con el activo en el primer mes del activo “fueron equivalentes a 4,5%”, aumentando en comparación con el nivel del mes anterior debido fundamentalmente a los mayores resultados por títulos públicos. Y fueron los bancos públicos y los privados extranjeros los que explicaron en mayor medida el incremento mensual de las ganancias.
Según aclara el Central en su último Informe sobre Bancos, “en los últimos doce meses las ganancias devengadas por el conjunto de bancos representaron 3,6% del activo”.
A modo de ejemplo, Banco Macro reportó en febrero un alza interanual del 42,4% en sus ganancias acumuladas durante 2014 al totalizar $ 3.479,5 millones, apoyada en mayores ingresos operativos. En tanto, HSBC informó que sus utilidades a nivel global descendieron 15% en 2014 debido al pago de una serie de multas a las autoridades reguladoras. El beneficio neto del grupo fue de US$ 13.700 millones el año pasado, por debajo de los US$ 8.700 millones de 2013.
El crecimiento de los últimos años dio lugar a que desde el Ejecutivo se crearan las líneas de inversión productiva con tasa subsidiada, que fueron tildadas como “dirigismo estatal” por ejecutivos del sector. Otro de los puntos de conflicto entre la banca y el Estado es la falta de ajuste por inflación. Los banqueros argumentan que el alza generalizado de precios distorsiona la medición de los resultados de todas las compañías, pero aún más cuando la mayor proporción del capital de una firma está invertida principalmente en activos monetarios (créditos, disponibilidades, inversiones financieras, etc.) en lugar de en activos no monetarios (mercaderías, inmuebles, plantas fabriles, etc.).
Por otra parte, Jonathan Bastida Bellot y Emiliano Mussi, del centro de estudios OME-Ceics, señalaron en su último informe de 2014 que en la década comprendida entre 2003 y 2013 la ganancia de los bancos sobre su patrimonio neto fue de 11,5% (por detrás de la industria, que creció 19,1%). También agregaron que desde 2008, el sector bancario “no paró de aumentar su rentabilidad”, y que “pasó de manera escalonada del 12% al 28% en 2013”.
