Los industriales pymes de la provincia de Buenos Aires realizaron una encuesta para conocer las expectativas empresarias del sector para lo que será el ritmo económico de este año, y la mirada resutó bastante pesimista.
El relevamiento lo impulsó la Federación Económica de la Provincia de Buenos Aires (FEBA), la Asociación de Industriales de la Provincia de Buenos Aires (ADIBA), la Unión Industrial de la Provincia de Buenos Aires (UIPBA) y la Confederación Económica de la Provincia de Buenos Aires (CEPBA), y entre los datos más destacados surgió que, más de la mitad de los industriales pyme bonaerenses cree que la economía empeorará y que la inflación podría alcanzar el 60%.
Sin embargo, de un lado positivo se destaca que la gran mayoría - un 75% de los encuestados-, planea mantendrá las fuentes de trabajo aunque apenas un tímido 15% planea incrementarla.
El Relevamiento de Percepción Industrial Bonaerense fue realizado en las primeras semanas de enero de 2022 y muestra, en materia de percepción económica e inversión, que si bien más de la mitad de los relevados considera que la situación económica empeorará en 2022 (52,5%), solo un 22,5% considera que ello repercutirá directamente en la situación de su empresa.
En cambio, un 60% prevé que el panorama económico se mantendrá similar, y un 17,5% piensa que mejorará.
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“Esta tendencia va en línea con el crecimiento que ha tenido la medición interanual de la actividad industrial en los últimos meses de 2021, donde se registra una reactivación de la producción y actividad económica, pero en varios rubros se está dando con mayor lentitud. Desde ya que no estamos como en el inicio de la pandemia, pero los empresarios industriales pymes necesitan más herramientas de financiamiento y bajar las cargas impositivas”, asegura Silvio Zurzolo, presidente de ADIBA.
Cuáles son los mayores problemas que identifican los industriales pymes
Entre las principales problemáticas económicas identificadas durante el relevamiento, se destacan: carga impositiva; inflación; legislación laboral deficiente; seguridad jurídica y caída del consumo. Otros temas que preocupan a los empresarios industriales pyme, aunque en menor medida, son el desabastecimiento, la falta de financiamiento y el déficit con relación al personal calificado.
El punto de mayor coincidencia entre el empresariado industrial bonaerense consultado, es sobre el origen de la crisis argentina.
El 85% hizo foco en el plano político y no en el socio-económico. También se registró un gran porcentaje (+90%), que menciona a la problemática de la carga impositiva como uno de los principales factores de estancamiento de las empresas.
El mal conocido de siempre, la inflación
Otro aspecto a tener en cuenta es la inflación. Un 62,5% de los encuestados prevé que la inflación para 2022 será de entre el 46 y el 60%. Mientras que un 22,5% la ubica por debajo de ese número.
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“La inflación es un problema que los argentinos venimos arrastrando desde hace décadas. Es necesario trabajar en políticas públicas que sean efectivas para poder controlar que se siga disparando, porque lo más perjudicados por la inflación son los empresarios pymes y los consumidores. Es imposible proyectar un crecimiento escalonado con una inflación que pareciera no tener techo”, comenta Zurzolo.
A pesar de las problemáticas expresadas en este relevamiento de apreciación de los empresarios industriales bonaerenses, es importante destacar que, en materia de empleo, un 75% de los encuestados afirma que mantendrá las fuentes de trabajo e incluso un 15% planea incrementarla.
“Si hay algo que tenemos claro, es que las pymes en general siempre fueron la columna vertebral de la productividad y actividad económica de este país, siendo la principal fuente de generación de empleo. Es por ello, que desde las Cámaras seguiremos trabajando en conjunto con los ministerios y gobiernos, para acompañar el crecimiento de aquellos empresarios industriales pymes que pudieron sobrellevar la crisis generada por la pandemia, y principalmente, para volver a levantar las persianas de aquellas empresas que tuvieron que cerrar o parar la producción”, concluyó Zurzolo, presidente de ADIBA.
LR
