El nivel general del Índice de precios al consumidor (IPC) registró en julio de 2021 un alza de 3% y acumuló en los primeros siete meses del año una suba de 29,1%, llegando a la cifra que había previsto en el Presupuesto el ministro de Economía, Martín Guzmán, para todo el año. Si bien se desaceleró con respecto a junio, registrando la menor tasa mensual desde octubre de 2020, la variación interanual aún es muy alta, trepando al 51,8%.
El sector de mayor incremento de precios fue Restaurantes y Hoteles, que registraron una suba de 4,8%. En segundo lugar, se ubicó la salud, con aumentos de 3,8%, mientras que en tercero se ubicaron los alimentos y bebidas no alcohólicas, que subieron un 3,4%. Ese último dato encendió nuevamente las alarmas, ya que se trata del rubro más sensible para los que tienen menores ingresos.
La inflación de junio fue de 3,2%, con acumulado de 50,2% en los últimos doce meses
Entre los alimentos, se registró un mayor aumento en Verduras, tubérculos y legumbres -donde se destacó, entre otros, el alza del precio del tomate-; Café, té, yerba y cacao; Aceites, grasas y manteca; Leche, productos lácteos y huevos; y Azúcar, dulces, chocolate, golosinas, etc. Estos aumentos estuvieron parcialmente compensados por las bajas en Frutas en algunas regiones del país.
La inflación núcleo se redujo pasando de 3,6% en junio a 3,1% en julio; mientras que los regulados bajaron de 3,2 a 1,4%.
En el mes, hubo aumentos de electricidad, colectivos, taxis y peajes en el interior. Los Estacionales aumentaron hasta 4,9% mensual (vs 0,5% en junio) por subas en Verduras y en servicios turísticos y de recreación por las vacaciones de invierno.