Tal y como lo anunció el Presidente Alberto Fernández a principios de la semana, este viernes 18 de marzo comenzó la "guerra contra la inflación". Por tal motivo, la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, comunicó que el gobierno lanzará en los próximos días "una serie de medidas" con el objetivo de frenar la suba de precios, en especial los de los alimentos.
"El Gobierno está comprometido en llevar adelante políticas y medidas que permitan garantizar (que no suban) los precios de los alimentos", indicó Cerrruti. La vocera presidencial advirtió no obstante que no debe esperarse "un plan milagroso" para resolver un problema que es "multicausal".
"Lo que sí tiene definido el Gobierno es la decisión de intervenir" para "defender el derecho de los ciudadanos", ante el aumento "de manera inaudita" registrado en las últimas semanas de los precios internacionales de los commodities, entre los que se encuentran los granos, el petróleo y el gas, precisó.
Asimismo, la funcionaria ratificó que "las retenciones a los granos no van a ser modificadas por el Gobierno nacional", ya que un cambio de ese tipo es "facultad del Congreso".
Llegó la "guerra contra la inflación": los mejores memes que dejó el anuncio de Alberto Fernández
Las medidas
Cerruti resaltó que no habrá "un plan anti-inflacionario de diez puntos, como tantas veces se anunció" anteriormente, sino que se irán dando a conocer "una serie de medidas" en "los próximos días".
En ese sentido, la funcionaria comentó que Alberto Fernández se reunió con el equipo económico para delinear las medidas y aseguró que no está en estudio "una suba generalizada de las retenciones" sino que hay "conversaciones con aceiteras y otros sectores" de la industria de alimentos para "garantizar el precio de la harina y el aceite".
"Si esto no sucede, existe la posibilidad de modificar la alícuota de los productos derivados de la soja", dijo Cerruti, en referencia a la decisión tomada por el Gobierno el domingo pasado de suspender el registro de exportaciones de aceite y harina de soja.
Cabe recordar que estos derivados tributaban hasta la suspensión una alícuota de 31%, que podría pasar a ser de 33% en el caso de que se retiren los alicientes que en su momento dispuso de manera directa el Poder Ejecutivo.
RM / LR