ECONOMIA
Diario Perfil

Martín Lousteau: "Lo que rige las decisiones del Gobierno es la caja-doxia"

El ex ministro analiza cuál es el objetivo del Gobierno al estatizar las AFJP. La necesidad de caja para cerrar el presupuesto 2009 . El programa financiero.

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El Gobierno nacional, cuya popularidad se encuentra en un descenso mayor al reconocido, enfrentará las elecciones legislativas de 2009 en un contexto económico y financiero sumamente adverso, por lo que su desempeño dependerá en buena medida de su capacidad para contener dentro de su espacio a numerosos actores cuya pertenencia responde a su fortaleza fiscal o, en términos más coloquiales, a “la caja”.

El actual escenario mundial y nacional resulta por demás complejo, con un derrumbe de la actividad económica ya perceptible tanto en cifras como en sensaciones. Ello aumentará la tasa de desempleo, la inflación será un problema menor pero no desaparecerá y se acentuará la caída del poder adquisitivo de la masa salarial.

La combinación de menor crecimiento económico, menores precios internacionales –con el consecuente impacto en la recaudación– y abultados vencimientos de la deuda pública hacía prever un 2009 con poca caja, lo que iba a limitar el margen de acción del Gobierno nacional.

Durante las últimas semanas, el Gobierno había intentado anuncios para revertir la situación, como la –inapropiada– cancelación total de la deuda con el Club de París con reservas y la reapertura del canje con los hold-outs –incluyendo la refinanciación de los préstamos garantizados. El agravamiento de la situación internacional dio por tierra con los efectos pretendidos.

Sin embargo, lejos de percibir la crisis internacional como un alerta y el fracaso de sus reacciones como la necesidad de un replanteo más general, el Gobierno nacional la considera una reafirmación de algunos de sus postulados más antiguos. Y las medidas que van tomando otros países no son entendidas como un indicador del pavoroso desconcierto global, sino como una portada perfecta para explicar extrañas políticas domésticas, tanto pasadas como por venir.

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