Cuando el próximo miércoles se realice la primera reunión entre el gobierno de la provincia de Buenos Aires y los docentes por la paritaria 2018, ya habrá dos señales de parte de María Eugenia Vidal para su contraparte, el titular del sindicato Suteba, Roberto Baradel. Por un lado, como ya había trascendido, el presupuesto 2018 incluye una pauta de inflación y aumento de partidas en general del 10%. Por el otro, y esto resulta una novedad para los gremialistas en las últimas horas, con un proyecto enviado a la Legislatura el Ejecutivo provincial aspira a eliminar exenciones de impuestos automotores e inmobiliarios a organizaciones gremiales, políticas y mutuales. Lo que se dice, una cancha marcada de antemano.
“Nosotros ponemos una estimación en el presupuesto, pero eso no quiere decir que sea una oferta salarial, la paritaria va por su propio camino y nosotros no negociamos por los medios”, explicó el ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, al presentar el proyecto de presupuesto 2018 junto al jefe de Gabinete de Vidal, Federico Salvai.
Lo cierto es que la pauta de inflación del Banco Central para el año que viene es en torno al 10%, en una franja que va del 8 al 12% según el régimen de metas que hasta ahora no se viene cumpliendo. Este año, el conflicto entre el gobierno y los docentes duró seis meses, con 16 días de paro y finalmente se firmó un aumento del 24% que según el sindicato llegó al 27,4 al incorporarse sumas fijas. Ahora, por primera vez la discusión arrancará el 1º de noviembre, aunque no está claro si habrá de movida una oferta salarial concreta por parte de la administración provincial.
Sorpresa. Pero este año habrá otra cuestión sobre la mesa, que hay que ver cómo la tomarán los gremios, que consultados para esta nota no emitieron opinión. El Gobierno enviará un proyecto de reforma impositiva a la Legislatura para eliminar exenciones de impuestos a los automotores y al impuesto inmobiliario que hoy beneficiaban a los gremios, los partidos políticos y otras mutuales, mientras que se mantendrá para las organizaciones religiosas. Es decir que ahora los locales y los autos de Suteba y otros sindicatos pasarán a estar alcanzados por las generales de la ley. Eso se da en el marco de una propuesta oficial de reducción del gasto político que la gobernadora Vidal está planteando, y que incluye también entre otras cosas eliminación de jubilaciones de privilegio para los legisladores, además de recortes de gastos de funcionamiento. Si bien es un ahorro módico, de no más de $ 300 millones de pesos, tiene fuerte poder simbólico en la discusión.
