El casamiento que unió establishment con filantropía

La boda que unió establishment con filantropía.
Hubo una sola cosa que no salió como se había planeado, que el jefe de Gobierno porteño oficiara de Juez de Paz. Pero todo lo demás salió perfecto y Gustavo Weiss, presidente de la Cámara Argentina de la Construcción, hizo de su casamiento la que bien podría llamarse la primera gran boda con el establishment presente. Aún queda por discernir qué motivos ulteriores lo motivaron a hacer un megafestejo en el recién inaugurado hotel premium de Puerto Madero. El tiempo lo dirá. O no. Mientras, la esposa de Weiss está por demás contenta: a una semana de la fiesta ya lleva recaudados 1,5 millones de pesos que destinará al Hospital de Clínicas, donde trabaja hace cuatro décadas. Los Weiss pidieron como regalo donaciones para ese nosocomio.

Se agranda... la casa.
Primero agrandó la familia al ser padre por segunda vez en 2016. Ahora ya son cuatro las mujeres que “gobiernan” su casa en Palermo: Bárbara, Manuela –hija de un matrimonio anterior de su mujer–, Paloma y Serena. Y este año, lo que Horacio Rodríguez Larreta está agrandando es su casa de fin de semana que a poco más de cien metros de la de José Torello, tiene en el Country PRO, es decir, el Newman. Por sus dimensiones la construcción representa casi otra casa nueva y por su ubicación cercana al Club House, la obra es seguida con atención por varios vecinos.
 
Emoción vence tensión.
Manuel Passaglia estuvo tenso durante todo el acto. En reemplazo de su padre como intendente de San Nicolás, estuvo en la reapertura del único jardín de infantes de La Emilia, un pueblo donde la inundación no solamente destruyó ese establecimiento escolar sino también el ánimo esperanzado de sus habitantes para quienes el “mejor presente prometido” parece algo lejano. Ya Ismael Passaglia –su padre con licencia en curso– enfrentó las quejas por las consecuencias de la situación mencionada. Aunque había tensión, la emoción en el discurso de la directora del jardín actuó como bálsamo tranquilizador para todos. Incluso para Manuel.

Despedida con amigos.
Las críticas a la gestión de Susana Malcorra no se notaron en la jura de su reemplazante Jorge Faurie: la ahora ex canciller recibió un aplauso tan extendido que hasta se emocionó.

Semana dificil.
“Pague después proteste”. Algo de esa lógica que manejan muchas empresas, incluso las de servicios públicos parece rodear a la polémica y cuestionada medida del Gobierno de quitar las pensiones por incapacidad. Es decir, primero se hizo la quita sin previo aviso a los beneficiados para que éstos tengan que volver a registrarse y de esa manera separar la paja del trigo. Del “pudo haber errores, pero lo solucionaremos” a “ya en 2015 también se eliminaron pensiones similares” estuvieron compuestas las explicaciones que tuvo que salir a dar Carolina Stanley, la ministra de Acción Social que así tuvo que pasar una “prueba de fuego” mediática en una situación de crisis. Algo que en los media training para políticos se ensaya una y otra vez.

Plegaria desatendida.
“(Urgente) un novio para Vidal”. Ese es el rezo –incluso mantra– de varios de la veintena de funcionarios bonaerenses que desde hoy domingo al martes próximo participan del retiro de trabajo en Chapadmalal. Tres días de análisis de gestión y de planes en desarrollo sin asistentes ni secretarios ni visitantes de cualquier otro tipo. Quizá competencia de karaoke para relajar un poco y deseo que el wi-fi funcione sin sobresaltos para alguna maratón de series.

A la caza de clientes.
El ex juez Jorge Urso sigue activo ofreciendo sus servicios como leguleyo con alto expertise. Esta vez, se lo vio en uno de it place porteños, el Pony Line del Four Seasons, intentando convencer de su performance legal a un empresario de perfil a veces mediático.