ESPECTACULOS

Bonadeo va por su quinto hijo

Confirmó que su esposa, Carmela Carey, está embarazada. El ex "gordo" ya tiene cuatro hijas.

Bonadeo, que bajó 30 kilos, junto a su mujer, Carmela Carey, 15 años menor.
| Cedoc

Gonzalo Bonadeo (48) confirmó hace pocos días que será papá por quinta vez: lo adelantó en su programa Despertate, por la señal de TyC Sports. A poco más de seis meses de haberse casado con Carmela Carey (33), el periodista no pudo contener al aire la emoción que le produce el nuevo embarazo.

El Gordo –como fue conocido desde sus inicios en la mítica primera formación de VideoMatch– no se privó de confesar: “¡Estoy muy contento, voy a ser papá de nuevo!”. El conductor ya tiene otras cuatro hijas: Catalina (18), Martina (16), Valentina (14) y Joaquina (4), la más chica, fruto de su relación con Carmela, su segunda y actual mujer, con quien se casó el 30 de marzo de este año en una ceremonia a todo trapo.

Más allá del matrimonio, fue un año de cambios para el periodista: hasta julio, encaminó el programa Planeta Bonadeo, ambiciosa apuesta televisiva que duró hasta el final de la Copa América y fue levantado –con cierta resonancia– por falta de rating en la medianoche de los domingos por Telefé. En competencia con El Show del Fútbol de Alejandro Fantino, Bonadeo comparó al ciclo de su colega con “dibujitos animados”.

Flaco. Además, ya desde antes de su casamiento, Bonadeo emprendió una dieta que le dio grandes resultados: lleva bajados más de treinta kilos (y se le nota). Su menor peso se vio acompañado por un nuevo proyecto laboral, que lo tiene como conductor de Menú Bonadeo, por la señal de 360 TV (de Claudio Villarruel y Bernarda Llorente).

Cabe pensar que su nueva apariencia lo pondrá a tono frente a las cámaras cuando comiencen los Juegos Olímpicos de Londres 2012, donde el periodista tendrá un papel de privilegio.

Ahora, con la felicidad de un nuevo bebé en camino, al ícono del periodismo deportivo solo le falta tener un varoncito: de esta forma, deberá romper con la tradición de los nombres terminados en “ina”, o bien apelar a su creatividad para dar con uno que cumpla con esa regla que respeta desde que debutó en su rol de padre. ¿Lo conseguirá?