La ceremonia contó con la presencia de cerca de 40 personas, poco más del íntimo velatorio que se realizó en el barrio porteño de Palermo, donde sólo se autorizó la presencia de 9 personas. Antes de la llegada del cortejo, cientos de fans se fueron acumulando en la puerta del cementerio para darle el último adiós al mediático empresario.
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El coche fúnebre partió este mediodía desde una casa velatoria del barrio porteño de Palermo, donde sólo asistieron nueve personas autorizadas por la familia, aunque las afueras estuvieron repletas de admiradores del mediático empresario, que asistieron para despedir al coche fúnebre.
Los fanáticos del chocolatero le arrojaban flores al auto fúnebre que trasladaba sus restos hacia Pilar. La escena contrastó con el íntimo velatorio, que se realizó en una casa fúnebre de avenida Córdoba al 3.600.
En el cortejo podía verse a los hijos de Fort, Felipe y Marta, dos mellizos de nueve años que quedarán bajo custodia de la expareja del empresario, Gustavo Martínez.
Los restos fueron trasladados al Cementerio Memorial, del partido de Pilar, donde llegaron poco después de las 14. Una misa para despedirlo fue el comienzo del íntimo sepelio.
