Gran Cuñado se ha convertido en la comidilla de la clase política argentina. A las visitas Francisco De Narváez - que se animó a un raggae PRO con su doble - y del líder rural Alfredo De Angeli se sumaron dos participaciones del oficialismo: la del jefe de Gabinete, Sergio Massa, y la más reciente: el gobernador bonaerense Daniel Scioli.
Acompañado de su mujer, Karina Rabolini y de su hija, Lorena, Scioli repitió que "hay que respetarla y cuidarla más a la presidenta" luego de que Marcelo Tinelli le preguntara sobre la imitación.
Fiel a su estilo, el gobernador bonaerense sostuvo que, en ese marco, hay que "cuidar la institucionalidad" porque "es la presidenta de todos".
Cuando el conductor le preguntó cómo lo veía a Kirchner coló su perfil de campaña y dijo que "a Néstor lo veo hiperactivo, con ese espíritu que tiene de liderazgo y gran sentido del humor". Al mismo tiempo, recordó que en su caso tuvo "más suerte que Cristina" porque a su lado "tuvo un vicepresidente que lo acompañó", en clara referencia a la distancia que marcó Julio Cobos.
Enfrentado con el doble de De Narváez se permitió algunas chicanas: "Francisco, basta de verso, eso de que tenés un plan ya no se lo cree nadie", le dijo.
Scioli contó, además, que cuando Kirchner recorre la provincia los chicos se acercan para decirle "haceme la escalerita, haceme el ascensor", dos caracterizaciones del humorista Freddy Villareal cuando se pone en la piel del titular del PJ en Gran Cuñado.