Hay rituales familiares que, pese a tener en sus manos la "máquina" más rendidora de la televisión argentina, él no está dispuesto a dejar de lado. Por eso, después de una maratónica jornada de grabaciones el lunes, Marcelo Tinelli y sus hijos partieron rumbo a unos días de descanso bajo el sol del verano boreal.
Tal como sucedió en los últimos inviernos, el conductor eligió Miami como destino para su receso de mediados de año. El plan fue sencillo: tardes de playa y pileta en un hotel cuatro estrellas, paseos para hacer shopping por Bal Harbour, buena comida y mucho relax; la diferencia residió en la incorporación a la troupe viajera de Ignacio Lecouna, el flamante novio de su hija Candelaria.
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