Si hay algo que puede reprochársele a Megan Fox es, sin dudas, la falta de coherencia. A sólo un par de semanas de aclarar que está harta de que le digan que es un símbolo sexual y de que no reconozcan en ella sus otras cualidades, lanzó una de esas frases que las chicas mediáticas y malas usan sólo para despertar ratones.
Muchos la habrán conocido a finales del año pasado, cuando montada a su primer protagónico en la película de Transformers , la morocha comenzó a liderar todos los rankings de belleza y sensualidad de las publicaciones especializadas.
Ella demostró conocer muy bien ese juego. Se prestó a los requerimientos de los fotógrafos y posó sin problemas –y con escasa ropa- para un sinfín de entrevistas y producciones.
Pero como suele ocurrirle a todas aquellas chicas que creen que tienen algo más para mostrar, rápidamente se aburrió del juego e intentó cambiar su perfil. "Soy una chica fiel y no podría nunca tener sexo con desconocidos", aclaró primero, tratando de ahuyentar del imaginario popular su imagen de comehombres.
Hace un par de semanas, fue más explícita aún: declaró que está harta de que le digan que es un símbolo sexual.
El problema es que ahora dio una vuelta de tuerca más al asunto, tal vez empujada por la necesidad de promocionar su más reciente película Jennifer's Body, en la que aparece totalmente desnuda, y disparó una de esas frases cuyo único destino es el de despertar ratones en la platea masculina.
"Tengo la libido de un chico de 15 años. De verdad me encanta el sexo y eso resulta ofensivo para algunos. ¡Soy joven, tengo muchas hormonas y estoy siempre dispuesta!, le dijo sin pudor a la revista FHM. ¿En qué quedamos?