Unas 50 mil personas corearon anoche en la Ciudad de México las canciones de la banda británica The Police, en el concierto que el trío ofreció como parte de su gira de reencuentro.
El recital comenzó con el clásico Message in a bottle y recorrió, uno a uno, los éxitos de la banda compuesta por Sting, Andy Summers y Steward Coperland.
El público estaba compuesto casi íntegramente por treintañeros que habían abonado entre 32 y 210 dólares para presenciar el show.
A nadie pareció importarle la lluvia que comenzó a caer al inicio del concierto. Nada iba a empañar la fiesta. La multitud coreó sin preocuparse éxitos como Don't stand so close to me , Walking on the moon y Every little thing she does is magic .
También hubo tiempo para que la banda dejara en claro, una vez más, su posición frente a los temas sociales que aquejan al mundo. Mientras tocaban Invisible Sun , se proyectaron imágenes de niños que viven en la pobreza.
Si bien los medios mexicanos aseguraron que la banda sonó como en su mejor momento, recalcaron –como ocurrió con la banda argentina Soda Stereo- que no se notaba un buen feeling entre los integrantes y que la interacción entre ellos fue casi nula.