Fue una noche caliente en "Gran Cuñado", la parodia de Marcelo Tinelli que "atornilla" a los políticos frente a la TV lunes, martes y jueves. En el marco del"derecho a réplica" que anunció hace unos días, el animador recibió esta noche a los hermanos Alfredo y Atilio De Angeli, para que el primero de ellos conozca y salude a su doble, protagonizado por Martín Campilongo.
"La verdad me han hecho reír, es bueno reírse en algún momento del día", dijo el verdadero entrerriano, que estuvo algunos minutos con su doble, hasta que Tinelli llamó a Atilio De Angeli, que estaba entre el público. Fue la parte más divertida del segmento, porque el menos famoso de los De Angeli no sólo se animó a contar un chiste, sino que hasta bailó un chamamé con la falsa "Presidenta Cristina", generando carcajadas a granel. Sobre todo cuando el personaje de la Mandataria confundió a De Angeli con el cuentista Luis Landriscina.
Pero faltaba algo más, el cierre serio del programa. Tinelli despidió a los De Angeli, que hablaron sobre el conflicto del campo diciendo que "todo está como el año pasado" y señalando que el Gobierno K se empeña en mantener el enfrentamiento con el sector agrario. Fue cuando Tinelli tomó la voz cantante y pidió "que se arregle de una vez el conflicto con el campo", rematando con otra frase sugestiva: "Hay que arreglar ese tema porque todo el país vive del campo".
Fue entonces el momento de pasar a la "votacìón telefónica" para ver quién era el eliminado de la semana. Zafaron los falsos Scioli, De Narváez, Cristina y Cobos, mientras que el que se despidió fue "Guillermo Moreno", curiosamente uno de los personajes más flojos de la parodia.